Melina Capucho, coordinadora de Políticas de Igualdad de la Defensoría del Pueblo de la Provincia
El taller Cortá a Tiempo fue declarado de interés municipal en Bahía Blanca. El programa de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires tiene como objetivo prevenir los noviazgos violentos, principalmente en adolescentes.
Melina Capucho, coordinadora de Políticas de Igualdad de la Defensoría del Pueblo de la Provincia, conversó con Radio Urbana sobre el taller que brinda contenidos teóricos necesarios para visibilizar y advertir situaciones en vínculos sexo-afectivos naturalizadas.
“Cortá a Tiempo” «nació a partir de una encuesta realizada a jóvenes de 15 años en adelante, en la cual se les preguntó acerca de lo que nosotras reconocemos como “señales de alerta” en las relaciones sexo-afectivas para ver si se había superado algunas cuestiones o si se seguían viviendo».
El miedo y el amor no van de la mano
Los resultados de la encuesta arrojaron que «las generaciones más jóvenes siguen viviendo situaciones como prácticas de control (revisar el celular, controlar actividades, estar pendiente de los vínculos), incluso como situaciones de violencia física o agresión sexual».
Capucho resaltó que la juventud es una etapa crucial para aprender a reconocer esas conductas violentas. «En la juventud aparecen los primeros vínculos que están atravesados por la inexperiencia. Hay ideas instaladas socialmente que hay que desandar para construir otros vínculos». Los adolescentes y jóvenes adultos aprenden actitudes de control a través de la música, las películas y la literatura. «Las redes sociales hacen masiva la llegada de esos mensajes».
Desde el taller se trabaja para erradicar mitos del amor romántico, donde cuestiones como estar constantemente junto a la pareja es considerado algo positivo. «Hay una idea instalada de que si estás en pareja es normal tener celos. Se ve como un símbolo de desinterés que la otra persona no te cele. Hay que separar las cosas, el miedo y el amor no van de la mano».
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