La Unidad de Información Financiera (UIF) requirió profundizar la denuncia ante el Juzgado Federal Nº 12 por un crédito simulado, gestionado por ese banco. Se trata de fondos traspasados entre filiales que debían ser destinados a «inversiones en seguridad y prevención de siniestros».
Con el incendio en el depósito de Iron Mountain confirmado como intencional, la Unidad de Información Financiera (UIF) exigió en las últimas horas a la justicia que profundice las investigaciones en torno a una presunta maniobra de lavado de dinero con préstamos entre filiales, operación que había sido gestionada por el banco HSBC.
Como si esto fuera poco, ese crédito, según reportó la firma de archivos, iba a ser aplicado a «inversiones en materia de seguridad y prevención de siniestros».
En el documento al que accedió Tiempo, el organismo que comanda José Sbatella, la UIF, se presenta en el marco de la causa «Iron Mountain Argentina. s/ averiguación de delito (lavado de activos)», que se inició gracias a una denuncia de la AFIP previa al incendio en Barracas. Ante Sergio Torres, titular del Juzgado Federal Nº 12, la UIF –que es querellante– refirió detalles de una «maniobra sospechosa de blanqueo mediante la simulación de un préstamo millonario entre compañías multinacionales del mismo grupo. Este préstamo –según dichos de la empresa– iba a ser aplicado a inversiones en materia de seguridad y prevención de siniestros».
De acuerdo al texto que consta en el juzgado, «de la pericia practicada, surge no sólo la intencionalidad del incendio, sino también que la empresa guardadora de archivos no había invertido en seguridad y prevención de siniestros en los últimos años, contrariando la manifestación realizada en sede judicial al momento de realizar su descargo. Así, no sólo se desconocen los orígenes del préstamo millonario, sino que tampoco se conoce su real aplicación en el patrimonio de la empresa».
La UIF detalló además que es necesario que «se indague a los responsables de la firma a fin de que brinden las explicaciones pertinentes en relación a la operatoria sospechosa».
Asimismo, el organismo destacó que a esto «deben sumársele los indicios que motivaron la denuncia original efectuada por la AFIP, entre ellos que el titular del 99% del paquete accionario de Iron Mountain Argentina resulta ser una empresa con radicación en las Islas Cayman, reconocido paraíso fiscal».
¿Qué detalles tiene el préstamo irregular que se pide investigar y por qué ahora toma relevancia? La causa se inició el 21 de mayo de 2014 a raíz de una denuncia de la AFIP en la que se dio cuenta de la existencia de dos firmas vinculadas –Iron Mountain South America Ltd. e Iron Mountain Chile Servicios SA– que se habrían constituido en paraísos fiscales y luego radicado en la Argentina al solo efecto de ser tenedoras de acciones de Iron Mountain Argentina SA sin realizar operación alguna por fuera de tal fin.
Como para la UIF esas firmas son sociedades pantalla que no tienen actividad, se sospecha que fueron utilizadas para ocultar la real titularidad de los fondos.
Para los técnicos del organismo anti-lavado, en 2007 Iron Mountain Argentina firmó un acuerdo con la sucursal suiza por un préstamo intercompañía por U$S 20 millones, con un interés de 8,7 por ciento.
La firma investigada habría recibido $ 17,8 millones, mientras que los pagos efectuados para su devolución alcanzan apenas $ 1,8 millones.
Para la UIF, se trata de una clara maniobra de «Back to Back», un préstamo encubierto con objetivos de blanqueo. Ahora que el fuego es intencional, la UIF pide acelerar las investigaciones teniendo en cuenta que se sospecha de una asociación ilícita entre la empresa y sus clientes para generar un siniestro en el que se perdieron documentos de más de 600 compañías.
Un dato clave, que toma hoy mayor relevancia, es que el préstamo fue canalizado por medio del HSBC, el banco que más documentación perdió entre los escombros y que está en el centro de la escena por facilitar esquemas de evasión de 4040 cuentas de argentinos en su sucursal de Ginebra.
La AFIP ya advirtió
El titular de la Aministración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) Ricardo Echegaray fue uno de los primeros que involucró el desastre de Iron Mountain con el HSBC.
Durante su visita al Congreso el 1 de abril, Echegaray se refirió a la relación entre el HSBC, Iron Mountain y el local de esta última que se incendió hace un año en el barrio porteño de Barracas.
«En las dos causas por evasión contra el HSBC que están en la justicia, la información estaba en Iron Mountain. Luego del incendio HSBC no aportó copia, información confirmada en el allanamiento de enero de este año», aseguró el titular de la Administración Federal de ingresos Públicos ante la atenta mirada de los legisladores de la comisión que preside el oficialista Roberto Feletti.
La información que brindó Echegaray en su alocución fue relativizada luego por las autoridades de la compañía multinacional. «Somos una más de las víctimas de ese incendio. Entregamos la información al Juzgado», disparó Gabriel Martino, titular del HSBC Argentina.
Sin embargo, Martino no terminó de aclarar nada. Echegaray, por su parte, explico que el Estado argentino «necesita conocer toda la historia de esas 4040 cuentas abiertas en la filial de Suiza (del HSBC), para saber el verdadero volumen de esos fondos, porque en vez de tener que repatriar U$S 3500 milloness capaz necesitamos repatriar U$S 9000 millones».
Fuente: Infonews