En los últimos días ingresó en la Cámara de Diputados nacional un proyecto de ley que busca otorgar distintos beneficios a PyMEs y emprendedores bahienses afectados por las inundaciones del pasado 7 de marzo. El mismo fue presentado por la Unión Cívica Radical, y propone que el Estado nacional se haga cargo de parte del salario de los empleados de dichos comercios damnificados, postergación del pago del monotributo, entre otras cuestiones.
Martín Salaberry, presidente de la UCR de Bahía Blanca, explicó que «el proyecto surge tras mantener distintas reuniones con comerciantes particulares y con las cámaras comerciales y gastronómicas locales no solo de Bahía Blanca, sino además de Ing. White y Cerri. En White hay 70 comercios, y la gran mayoría quedó bajo el agua y con pérdidas tanto inmobiliaria como material. En Bahía Blanca hicimos un gran relevamiento, y se estableció que el 30% de las PyMEs del macrocentro tuvieron daños graves, y se estiman pérdidas de $60 millones de pesos en daños inmobiliario y mercadería de venta».
«En general, los bancos no están otorgando buenos créditos para poder reconstituir el capital de trabajo perdido. En ese sentido, el que debe pagar salarios y no tiene un peso se ve obligado a cerrar sus puertas. Por eso planteamos estas medidas excepcionales para ayudar a las empresas de Bahía Blanca, Cerri y White en este contexto de catástrofe y excepcionalidad absoluta» Martín Salaberry.
¿Cuáles son los puntos que trata el proyecto en cuanto a la asistencia a los damnificados? El dirigente marcó que «a partir de ese relevamiento, pensamos en la forma para colocar un ‘respirador artificial’ que permita la supervivencia a las PyMEs, entendiendo que algunas de ellas ya debieron cerrar sus puertas por no tener la espalda económica para sostenerse. Hoy se estima que entre 3.000 y 6.000 personas tienen su empleo en riesgo. Así surgió la idea de esta especie de ATP para que las empresas mas chicas puedan afrontar los problemas de pérdida de mercadería y solventar el pago de los salarios a sus empleados. Es una medida acotada a los próximos tres meses, para que no mueran las PyMEs y no se pierda el sustento de vida de las familias detrás de cada comercio».
En detalle, Salaberry agregó que «además de la asistencia salarial, hay otros casos de emprendimientos unipersonales que también han sufrido pérdidas de sus medios de trabajo, y hoy se encuentran imposibilitados de generar ingresos. Para autónomos, cuentapropistas y monotributistas prevemos beneficios impositivos en el cobro de intereses desde ARCA. También que haya una postergación de las contribuciones patronales o cargas sociales durante tres meses, y después ver si se extiende dependiendo la necesidad. Son medidas que buscan la posibilidad de supervivencia en el corto plazo».