Ya pasaron tres meses desde la decisión del Municipio de clausurar el Mercado Municipal, y con la llegada del nuevo año han anunciado que en los próximos días empezarán con las obras pertinentes, lo que requerirá la salida de todos los comerciantes que aún hoy siguen trabajando allí. A pesar de esto, muchos de ellos todavía no consiguieron una alternativa viable para continuar con sus actividades.
Por eso, María de los Ángeles Rosón, representante legal de 12 comerciantes, explicó en comunicación con Radio Urbana que «desde el Municipio me adelantaron que van a comenzar los trabajos y van a poner vallados, por lo que los puesteros que no se han mudado quedan condicionados. Vallar el Mercado produce un perjuicio para los comerciantes».
«En las calificaciones que se establecieron en el decreto, se introdujo el riesgo de vida de las personas. Ese era el fundamento para cerrar el Mercado. Los hechos nos dieron la razón, hace 3 meses sigue funcionando» María de los Ángeles Rosón.
La abogada detalló que, de sus representados, «seis puesteros consiguieron lugares, de los cuales dos están a la espera de que se finalicen las obras de sus nuevos locales y cuatro ya los tienen asignados. Los seis restantes no han conseguido locales pese a la buena voluntad. Para ellos, el Municipio propuso darles un subsidio«.
Lejos están de sentirse contentos con esa situación. Rosón afirmó que «me preocupan si las condiciones de los comerciantes que no consiguieron local van a ser satisfechas. El subsidio es una resignación a que no consiguen su lugar y que no podrán reabrir. Los montos deben ser equitativos entre quienes consiguieron locales y quienes no».
«No es sencillo encontrar locales acordes a las actividades de los puesteros, y eso no se tuvo en cuenta a la hora de cerrar el Mercado. Los propios comerciantes fueron buscando lugares viables y cuando los propietarios se enteraban que alquilaba el Municipio y no la persona, quedaban frustrados. Muchos propietarios se han negado a contratar con el Municipio».