Hoy se cumple un año de la clausura del Mercado Municipal aduciendo riesgos estructurales, fallas en el sistema eléctrico y en la red de prevención de incendios. En ese tiempo, el Municipio todavía no pudo relocalizar a todos los comerciantes que allí se desempeñan, pero sí empezó con los trabajos de refacción, causando un perjuicio incalculable en aquellos que todavía no se fueron del mercado.
Uno de ellos es Juan Mercatelli, de ‘Sabores Todo Suelto’, quien aseguró aseguró que «tengo que ir a buscar la mercadería yo mismo porque las distribuidoras no quieren frenan con sus fletes en el lugar porque les hacen multas, desistieron de venir. Además, por la baja de ventas no vienen los fletes a traer unos pocos productos. Sin contar el problema económico, solo por esta situación que generaron llega un 60% menos de gente al local todos los días«.
«La pérdida de clientela que sufrí en todo el año no se si la voy a poder recuperar. No entiendo por qué en vez de desarmar no utilizaron esos recursos para refaccionar el local para nosotros, y después podían demoler tranquilos todo lo que necesiten» Juan Mercatelli.
¿Cuántos comerciantes están pasando por esta situación? «Hoy hay tres locales atendiendo al público: la pescadería, la pizzería y mi local. Éramos más de 20 puesteros y muchos no aguantaron el cimbronazo, arreglaron con el Municipio y se fueron. Yo arreglé en conjunto con la pescadería para irnos los dos a un local en calle Donado, y todavía estamos esperando a que terminen para que nos mudemos. Supongo que es un problema interno de ellos de tiempos y presupuestos, no entiendo por qué están tardando tanto. El acuerdo lo hicimos el 28 de diciembre por el local nuevo, solo falta hacer un cerramiento y terminar una persiana. Estoy en contacto con el Municipio, pero es muy lenta la cuestión de los presupuestos. Sus tiempos no son los nuestros».
Por último, Mercatelli detalló que «en cuanto a las obras de refacción del mercado hoy no se está haciendo absolutamente nada, está todo parado. Lo único que se hizo fue desmantelar los puestos que quedaron vacíos, llevándose las divisiones que separaban los puestos. La luz funciona normalmente y la seguimos pagando».