Han pasado casi ocho meses desde que el intendente Héctor Gay decretó la clausura del Mercado Municipal, apoyándose en diversos informes técnicos que advierten una peligrosidad edilicia y de infraestructura, así como también un alto riesgo de incendios. A día de hoy, sigue habiendo comerciantes a los cuales no se les ofreció una solución final al perjuicio causado por esta situación.
María de los Ángeles Rosón es abogada de una docena de comerciantes del Mercado Municipal, y detalló en Radio Urbana que «tengo tres puesteros que aún continúan en el Mercado. Hasta el viernes tenía cuatro pero el vivero alquiló un local en calle Drago con el subsidio y ya está funcionando allí. Queda una verdulería, un local de ‘Todo Suelto’ y una pescadería, y tengo otra en el proceso de mudanza, que no son situaciones fáciles. Aún así, hay buena voluntad de mis representados, ya que se quieren retirar del mercado por las condiciones en las que está y la disminución de la clientela. Que todavía no haya sucedido es una absoluta decisión del Municipio, por su tardanza en la gestión respecto a lo que nos comprometimos en las actas acuerdo que firmamos en su momento».
«Esto ameritaba un equipo de trabajo que abarque todas las situaciones posibles que se dan en una mudanza, que no es fácil. Quienes tengan comercios en Bahía Blanca saben de la burocracia involucrada, faltó previsibilidad en ese sentido. Esto significó un impacto grande en la ciudad, afectó a un montón de familias; son 21 puesteros y cada familia que se mantenía de su trabajo, fue un perjuicio muy grande» María de los Ángeles Rosón.
En cuanto a la situación particular de sus representados, la abogada marcó que, por ejemplo, «en la pescadería que se está mudando faltan actas de habilitación, las cosas se podrían haber hecho de otra manera. La verdulería que queda se acogió al beneficio de que el Municipio le alquile el local en calle Saavedra. Se hicieron las adecuaciones necesarias pero surgió un nuevo conflicto: le quieren entregar el local sin haber terminado el techo. Estamos hablando para que esto se solucione y creo que habrá una solución, la tendrán que evaluar. La comerciante se merece recibir un local terminado».
Agregó en este sentido que «en relación a los otros dos, que se van juntos, son una pescadería y una venta de productos sueltos. Están bastante complicados porque van a un local en calle Donado, donde el Municipio ni siquiera ha comenzado a hacer las reparaciones edilicias, y eso va a llevar tiempo. Dicen que han avanzado en la contratación de empresas pero los precios eran muy altos, pero lo cierto es que los trabajos de puesta en marcha del local no han comenzado».
Aclarada la situación de las y los comerciantes, ¿cómo continúan los trabajos sobre la estructura del Mercado? Rosón aseguró que «nos dijeron que esta semana comenzaban a hacer los derribos de aquellos locales que se encuentran vacíos con el compromiso de no afectar aquellos que continúan allí. Respetando eso, los trabajos van a avanzar. Una vez que se vaya la vinería que funciona en el exterior se comenzará a vallar y se trabajará en la fachada. Será muy complejo para quienes sigan allí continuar con su actividad, estos trabajos ya están empezando».
- Te podría interesar: