La tasa de desocupación en el segundo trimestre del año bajó al 6,9%, frente al 9,6% de igual período del año pasado, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
En Total Normalidad dialogamos con Luis Campos, coordinador del Observatorio del Derecho Social de la CTA – Autónoma, «este dato es bueno solo en términos relativos: es el porcentaje más bajo para un segundo trimestre en los últimos siete años. Pero dice mucho de la precariedad laboral que enfrentan muchos trabajadores y trabajadoras: más de un cuarto busca trabajo o quiere trabajar más», advirtió.
1. La tasa de desempleo en el segundo trimestre fue del 6,9%, la más baja desde la recuperación del INDEC a comienzos de 2016. Un buen dato en el marco del aumento de la precarización ocupacional y del deterioro salarial. Prohibidas las lecturas lineales. Sale hilo
— Luis Campos (@luiscampos76) September 21, 2022
En este marco, explicó: «Estamos con el nivel más bajo de desocupación desde que se normalizó el Indec en 2016. El primer mes del año fue baja la desocupación y esperábamos eso mismos valores porque la economía hasta mediados de años iba a seguir creciendo». Sin embargo, «cuando uno ve los datos del Indec sorprende que creció el trabajo no registrado. Es decir, sin aportes al sistema de seguridad social. Cada vez hay más trabajadores y trabajadoras que salen a buscar empleo, pero encuentran uno precario», remarcó.
Campos explicó que, por la baja de los ingresos en los hogares, los integrantes de una familia terminan sumándose a esos puestos de trabajo no registrado.
«El trabajo no registrados no te garantiza un ingreso por arriba de la línea de pobreza». Pero, quienes sí tienen un ingreso registrado también han notado una baja en sus ingresos por lo que «no pueden garantizar el acceso a la canasta básica».
En tanto, expresó que «los trabajadores que ya tenían un puesto, pero no les alcanzaba, salieron a hacer otra actividad por medio del monotributo. Entonces hay un pluriempleo».
Por otra parte, destacó que los principales avances se registraron en los grupos poblacionales más desfavorecidos. «El desempleo en las mujeres jóvenes bajó del 22,4% al 13,9% en un año y el de los varones jóvenes lo hizo del 16,1% al 12,6%».
El dato más complicado del informe del INDEC es el fuerte aumento del empleo no registrado que alcanzó el 37,8% de los asalariados, por lejos el valor más elevado de los últimos siete años.
Para terminar, reiteró que, «la insuficiencia de ingresos en los hogares fuerza a los trabajadores a buscar ingresos adicionales (aumento de la tasa de actividad y de la tasa de empleo). La oferta en el mercado formal languidece, por lo que terminan recayendo en empleos no registrados o por cuenta propia».