En un nuevo año de contienda electoral, la ONG Transparencia Electoral y el Observatorio de Mujeres y Política impulsan un proyecto de capacitación a mujeres candidatas para mejorar las condiciones de competencia.
Hablamos con la Dra. en Psicología, Virginia García Beaudoux quien además es especialista en Comunicación y Liderazgo con perspectiva de género: «Aunque competimos en los mismos escenarios que los hombres, lo hacemos con la cancha en contra, porque los escenarios de poder todavía están concentrados en los partidos de los varones».
Y agregó: «Es un tema de disputa de poder, la política tiene espacios limitados. Nunca escuche a nadie que diga que se cansó de tener poder y el poder te da la capacidad de repartir los recursos simbólicos y económicos, es característico que se haya instalado. Las leyes de paridad son fundamentales, pero no alcanzan, necesitas un cambio en la cultura de las organizaciones partidarias e instituciones, más allá de la obligación por ley, en la toma de decisiones las mujeres deberían estar involucradas».
La especialista indica que pese a los avances significativos que se produjeron en materia de paridad política, aún queda mucho por avanzar. «Con las leyes de paridad de género no es que vamos a tener el doble de bancas, los recursos de poder son los mismos».
«Argentina es pionera en muchas cuestiones de género, estamos mejor que otros países, pero todavía nos queda un largo camino que recorrer».
Dato de índice de paridad: la medición del Índice de Paridad Política (IPP) que pasó de 44,7 a de 55,6 –sobre un máximo de 100—, es decir, casi 11 puntos más que en 2016, pero por debajo de los tres países de la región mejor puntuados. El IPP contempla 8 dimensiones: las peores evaluaciones se obtuvieron en “Poder Judicial y Electoral” y “Partidos Políticos”, donde se demuestra un severo déficit de igualdad de género.
«En general las mujeres que resisten en la política son aquellas que tienen muchísima convicción porque se tienen que aguantar muchas cosas más que los hombres», remarcó la doctora en psicología.
El objetivo no es sólo que las mujeres accedan a cargos de poder, ni visibilizar esa llegada, ni siquiera es sólo colocar una perspectiva de género a las políticas que se formulen. Se busca modificar la manera misma en la que se ejerce el poder.
En tal sentido, mencionó que nuestro país es pionero en la lucha por la igualdad de género. «Sin embargo, considero que no estamos tan bien, porque la paridad no debería terminarse en lo legislativo, debería alcanzar a los rectorados, los ejecutivos, cargos ministeriales, entre otros», puntualizó
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