Del 16 al 22 de mayo se celebra la Semana Mundial del Parto Respetado. Esta iniciativa es impulsada desde el 2004 por la Asociación Francesa por el Parto Respetado, UNICEF y la Organización Mundial de la Salud y otros organismos internacionales para visibilizar los modos de atender los partos en el mundo y para promover el cumplimiento de los derechos de las personas gestantes y recién nacidas.
En Argentina contamos con la Ley 25.929 de Parto Humanizado que fue aprobada el 24 de agosto de 2004 y reglamentada por decreto en el año 2015. La ley garantiza el derecho de las personas gestantes, las familias y el recién nacido a atravesar un parto con respeto por las decisiones de acompañamiento, la intimidad y con los cuidados necesarios. También es una respuesta a la violencia obstétrica que, a pesar de estar tipificada como una forma de violencia de género, muchas veces se manifiesta en prácticas naturalizadas.
El principal objetivo de la ley de parto respetado es visibilizar y difundir información sobre la necesidad de respetar las decisiones de las personas gestantes y las familias, por supuesto que es responsabilidad del Estado garantizar los espacios y las herramientas necesarias para que esto se cumpla. En el Hospital Penna se realizan cursos para las familias y también el primer nivel de atención de salud en la ciudad se ven implicadas este tipo de actividades.
En el plano provincial, la diputada bonaerense por Unidad Ciudadana, Mariana Larroque, impulsó en 2020 la adhesión de la Provincia de Buenos Aires a la Ley Nacional de Parto Humanizado. Además el jueves pasado la legislatura dio media sanción al Plan Estratégico Provincial de Parto Respetado.
En Bahía Blanca el Hospital Penna es es el único de los efectores públicos que tiene servicio de maternidad, alrededor de 2.000 partos al año se practican en la institución.
Sergio Mendoza, jefe del servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Penna y coordinador de la guardia obstétrica del Privado del Sur explicó en Radio Urbana: «El parto respetado es el tipo de nacimiento que va a necesitar una familia. Implica no hacer una cesárea injustificada, que haya practicas al recién nacido que se realicen en otro momento y no en el parto, que la usuaria elija cómo quiere tener el parto. Tiene que ver con no hacer intervenciones si no hace falta».
«Está disminuyendo el número de nacimientos, de 3.500 a 3.000 y el año pasado, que fue un tiempo difícil por la pandemia, nacieron alrededor de 2.000 bebes».
«Lo que está faltando es mayor educación para la población, los médicos también tenemos que desaprender ciertas cosas. En mí formación todos teníamos la rutina de la intervención, si no la cumplías eras severamente sancionado. En los últimos años la evidencia muestra que cuanta menos intervención menos complicaciones», explicó Mendoza.
A nivel nacional la tasa de cesáreas realizadas ronda el 30 por ciento y en Bahía llega al 44 por ciento, es decir que superamos el promedio nacional. Hay muchas opiniones sobre si acceder a una cesárea es algo positivo o negativo para la persona gestante y para el recién nacido.
«Para un chico no es lo mismo nacer por cesárea que por un parto. Tenemos que acompañar a la comunidad en los cambios».
Finalmente, Mendoza recomendó planificar los embarazos y acudir a las Unidades Sanitarias del primer nivel de atención a realizarse los controles médicos.
Para brindar información a personas embarazadas se realizará una charla informativa el día viernes 20, a las 14.30 hs, en el local de la Cooperativa ubicado en Zelarrayán 575.