La Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), lanzó su habitual indicador del consumo minorista en nuestro país: según informaron, las ventas en los locales aumentaron un 25,5% durante el mes de enero respecto al mismo período del 2024, lo que afianza una recuperación que ya empezó a notarse durante diciembre del año pasado.
Salvador Femenía, director de prensa de la CAME, aseguró que «si lo comparamos con enero del 2024, evidentemente tenemos un incremento número altísimo, pero cabe destacar que enero del 2024 había caído 28,5%. Por eso, la recuperación actual no llega a compensar esa pérdida, pero igualmente es importante en un mes que siempre es atípico. Esto es un poco una continuación de lo que pasó en el mes de diciembre, donde realmente las ventas fueron muy buenas y sentimos la recuperación del consumo, sobre todo por cierta recuperación del salario real y la aparición del crédito y la estabilidad, eso ayudó mucho a las ventas. Además, enero viene acompañado de mucha gente que se fue a vacacionar, con lo cual mucha gente dejó de comprar en los centros urbanos, y por ahí se compensa un poco en los centros turísticos».
«Un problema de la última década en la Argentina, es que venimos de altos índices de inflación y crisis recurrentes, y cada vez se precipitan más rápido. El que pone un comercio y quiere recuperar rápidamente su inversión luego no termina en los niveles de capital esperados» Salvador Femenía.
¿Hay una diferenciación por rubros de este aumento de las ventas? «Fue un incremento más bien generalizado, donde todos los rubros se recuperaron, incluso aquellos que venían bastante rezagados con caídas durante todo el año, que se mantuvieron hasta el último momento. Éstos son particularmente los que tienen que ver con perfumería y farmacias, algo que entiendo es meramente coyuntural por el problema del costo de los medicamentos, las coberturas de obras sociales y de imposibilidad de acceder a algunos; eso no se va a recuperar rápidamente. Se dio la particularidad que en enero, un año marcado por el turismo, lo que más se recuperó fue el rubro de bazar y el hogar. Mucha gente quizás decidió no irse de vacaciones, y dedicar ese esfuerzo a la casa».
Por último, Femenía destacó que «si bien las ventas se están recuperando, evidentemente no estamos en un nivel de venta que asegure que todos los negocios puedan cubrir sus costos fijos. Hoy lo vemos como un inconveniente, y tenemos que ver con qué márgenes brutos de ganancia se estabiliza la economía. Hoy todo está más ajustado, y hay impuestos provinciales y tasas municipales que pegan directamente sobre ese margen bruto, y realmente reducen mucho la rentabilidad final del comercio».