Martín Lousteau avisó que no bajará su candidatura para jefe de Gobierno y que competirá en el balotaje con Horacio Rodríguez Larreta, candidato del macrismo. El Tribunal Superior de Justicia porteño dio a conocer la nueva pantalla táctil, que incluye una nueva disposición de los candidatos y del «botón» para votar en blanco, en la que los habitantes de la Ciudad tendrán que elegir el próximo 19 de julio. Los principales dirigentes del PRO se mostraron públicamente de acuerdo con que haya segunda vuelta, tal cual dicta la Constitución local. Sin embargo, la polémica alrededor del balotaje no terminó. Y el malestar en el espacio gobernante de la Ciudad se hace evidente, consignó Tiempo Argentino.
«Los ciudadanos se quejan, pero un día tenemos que emprender la reforma constitucional, porque no es lógico tener un sistema electoral en términos de requisitos para primera y segunda vuelta más exigente que la presidencia. Hay algo raro ahí», se quejó el jefe de Gobierno, Mauricio Macri, en un reclamo abierto, público, que denota la preocupación del PRO por la definición de la alcaldía.
Desde el macrismo soñaban con un triunfo en la primera vuelta o, como ocurrió, con una ventaja que pareciera irremontable. Los 20 puntos de diferencia que le sacó Rodríguez Larreta a Lousteau fueron exactamente lo que preveían, pero no ocurrió el segundo vaticinio del espacio amarillo: que el candidato de ECO se bajara del balotaje.
Confirmada la disposición del ex ministro de Economía de volver a las urnas, o a las máquinas de Boleta Única Electrónica, en los alrededores del precandidato presidencial opositor mejor posicionado en las encuestas comenzó otra campaña, que se difundió en los medios de comunicación afines, para considerar el balotaje como innecesario y costoso.
«La Constitución es clara», se atajó Macri en diálogo con radio La Red, ayer, para remarcar el discurso público que sostiene casi todo el PRO de defensa de las leyes. Por lo bajo, en cambio, despotrican, se quejan de tener que afrontar una nueva vuelta electoral durante la campaña presidencial y, aunque están convencidos de que finalmente el jefe de Gabinete porteño se alzará con la victoria, no quieren pagar el desgaste político de una pelea contra un socio dentro de Cambiemos, la alianza electoral que Macri selló con Elisa Carrió y Ernesto Sanz –que apoyan a Lousteau en la Ciudad–.
«Algún día –insistió el alcalde saliente– hay que hacerlo. Hay que cambiarlo (el sistema electoral), si no siempre va a pasar que cada candidato, por más diferencia por la que haya perdido, va a pedir ir a la segunda vuelta.»
El «pedir» parece un lapsus, aunque es lo que sostienen dentro del macrismo: que ir al balotaje es un capricho del aspirante de ECO y no un derecho constitucional. Y que es, a la vez, un error reglamentario no tener las mismas pautas que en una elección nacional, donde basta con alcanzar el 45% para ganar en la primera vuelta.
Con la disputa instalada en el territorio porteño, Mauricio Macri salió a golpear al rival del PRO en la Ciudad («Lousteau subestima a la gente») y también en otros frentes que considera importantes: la provincia de Buenos Aires y, con ella, su rival nacional, Daniel Scioli.
«Bajo el gobierno de Daniel estamos condenados a que todos los males que él reconoce que hay en la provincia se van a extender a todo el país: no cloacas, no distribución de gas, no desagüe, no pavimento, no escuela pública de calidad y no hospitales públicos de calidad», dijo después de asegurar que al recorrer la provincia se ve «la calidad de vida que hay de un lado del Riachuelo y del otro».
Ya en tono de candidato presidencial, en declaraciones radiales Macri aseguró que, en caso de alcanzar el poder nacional, no le va a «temblar el pulso» para negociar con «los poderosos del mundo».
Larreta, contra Lousteau por el voto en blanco
«Está subestimando a la gente con su denuncia. El que quiera votar en blanco lo va a hacer independientemente del tamaño y ubicación de esa opción en la pantalla», sostuvo el candidato a jefe de Gobierno porteño del PRO, Horacio Rodríguez Larreta, para responderle a su rival en el balotaje, Martín Lousteau.
El aspirante a alcalde por ECO había dicho que es «una ventaja para Larreta» poner la boleta en blanco en primer nivel, en referencia al diseño de pantalla que fue definido por el Tribunal Superior de Justicia esta semana, a pesar de las quejas de la oposición porteña.
Diferentes dirigentes de ECO protestaron por esa decisión, que fue defendida por el macrismo. «Estamos discutiendo el tamaño del voto en blanco en vez de contar cómo le vamos a mejorar la vida a la gente», agregó Rodríguez Larreta, minetras que su compañero de fórmula, Diego Santilli argumentó que «Lousteau está agresivo y no habla de los temas importantes para los vecinos, entonces mi sensación es que no conoce la Ciudad y eso lo hace ponerse más agresivo. Nosotros estamos para construir y debatir.»
Fuente: Infonews