Los sindicatos concentrados en la Central Obrera realizaron el primer paro general en repudio a las políticas de ajuste del Gobierno nacoinal.
Desde la CGT regional celebraron un gran acatamiento en Bahía Blanca por parte de los trabajadores. Guillermo Molina, dirigente de la CGT, dialogó con Radio Urbana y explicó que con el paro total quedó en claro cual es la voluntad y el estado de animo de la población en cuanto a las consecuencias del plano económico: «Si el Gobierno no sabe hacer una lectura objetiva de lo que el pueblo le está diciendo, vamos a marchar directamente a la polarización de los planes de lucha porque está claro que lo que está diciendo el pueblo ya no se puede seguir viviendo. Así no hay más margen».
Con respecto a la decisión del sindicato de empleados de comercio de no adherir al paro, Molina dijo que está separado en términos operativos la regional de bahía blanca: «Será una decisión de comisión directiva y de Miguel Aolita».