El rechazo del Concejo Deliberante de La Matanza a la propuesta de dividir en cuatro comunas al municipio más poblado del conurbano bonaerense terminó en otra polémica. La iniciativa impulsada por el GEN en la legislatura provincial (que cuenta con la simpatía del gobierno bonaerense de Cambiemos aunque sin jugarse expresamente por la reforma) enfrentó al massismo –sin una postura unificada– y al peronismo, que resiste el desguase. Los concejales del FpV-PJ rechazaron la división del distrito y enviaron a comisión las propuestas de Cambiemos y del Frente Renovador de convocar a una consulta popular. Pero desde el massismo afirmaron que se aprobó su iniciativa y abrió una nueva disputa en La Matanza.
El oficialismo comunal convocó el viernes pasado a una sesión del Concejo deliberante, en el que tiene mayoría propia, para rechazar la iniciativa de dividir la comuna con la presencia en el recinto del ex intendente y titular del PJ bonaerense, Fernando Espinoza. En la misma sesión se pasó a comisión la propuesta de Cambiemos para convocar a un plebiscito popular por la división y otra iniciativa con el mismo objetivo del FR. Pero el edil massista Fernando Asencio difundió su propia interpretación: “el Frente Renovador presentó y fue aceptada la herramienta de la consulta popular por la división de La Matanza, un gran día”, tuiteó en la red social.
Los concejales del FpV-PJ salieron a desmentir la versión. Ayer fue el turno de la propia intendenta Verónica Magario. “Los que queremos a nuestro pueblo, sabemos que dividirlo sería dejar a alguno de esos municipios ricos, pero a otros muy pobres. Habría una gran brecha entre unos y otros y eso no es lo que queremos para nuestras ciudades. Pretendemos trabajar y construir una Matanza creciente, juntos. No se pueden salvar una o dos ciudades y tirar al abismo al resto”, dijo la jefa comunal en la fiesta con que los empleados de Comercio de la zona oeste celebraron su día en el polideportivo de González Catán, junto al sindicalista y edil massista Julio Ledesma.
Allí, Ledesma –que destacó la presencia de Magario porque “respeta la pluralidad de ideas”– fijó postura. “Entre todos tenemos que pujar para que no cometan torpezas con La Matanza. Es peronista, es grande y hay que solucionar muchos problemas antes de llegar a lo que quiere el oficialismo, que es dividirla para reinar”, afirmó.
Magario ya había salido al cruce del vicepresidente de la Cámara diputados provincial, el macrista Manuel Mosca, quien mediante una misiva la invitaba a una audiencia para discutir la división del municipio. La jefa comunal respondió con otra carta proponiendo a Mosca y la gobernadora María Eugenia Vidal “abordar los asuntos que verdaderamente son relevantes y urgentes para La Matanza”.
Consultada por Página/12, Magario calificó el desguase como “botín político” y aseguró que con lo que se destinaría económicamente a la creación de tres nuevas comunales “inviables”, “en cuatro años extendería las redes de agua potable y gas a todos los rincones del municipio, asfaltaría todas sus calles, duplicaría los centros de salud y los efectivos y patrulleros de la policía local”.
Desde la gobernación buscaron bajarle decibeles a la confrontación. Voceros de Vidal afirmaron a Página/12 que el proyecto “no está entre las prioridades” de su administración y que consideraban que no podría tratarse antes de las elecciones legislativas del año próximo, aunque reconocieron que Vidal pidió a distintos organismos –los ministerios de Economía y de Producción y ARBA– que analicen la iniciativa.
Sobre la opinión de la gobernadora, sus voceros se remitieron a las declaraciones de Vidal: “No podemos someter a la gente de La Matanza a una discusión política electoral de ver con qué se queda cada uno. Hay que discutirlo, analizarlo técnicamente, esto va a llevar varias semanas, hay que ver dónde están ubicados los hospitales, las comisarías, qué inversión adicional se tendría que hacer, cómo es el tema de la burocracia, porque tampoco vamos a multiplicar por cuatro la estructura actual de La Matanza, merece una cosa seria y profunda y no que tenga que ver con lo electoral y si te conviene o no te conviene”.
La propuesta del diputado del GEN, Marcelo “Oso” Díaz, propone dividir en cuatro el más populoso municipio del conurbano, con 1.775.000 habitantes. Uno conservaría el nombre de La Matanza (San Justo, Ramos Mejía y Villa Luzuriaga). Los otros serían Los Tapiales (Lomas del Mirador, La Tablada, Ciudad Evita, Aldo Bonzi y Villa Madero), Gregorio de Laferrere (Isidro Casanova, Rafael Castillo y Laferrere) y Juan Manuel de Rosas (González Catán y Virrey del Pino).
“No se trata de un tema político-electoral. El peronismo ganó en esos cuatro lugares en las elecciones de 2015. Tomo el antecedente de un proyecto impulsado por Alberto Balestrini que proponía dividir La Matanza en cinco antes del ‘99 y reproduzco otro de la ex diputada radical matancera Liliana De Miguel”, se justificó Díaz ante Página/12.
Fuente: pagina12.com.ar