Mientras Mauricio Macri y Gabriela Michetti festejaban en el búnker de Cambiemos el triunfo en el balotaje presidencial del 22 de noviembre del año pasado, un delincuente lograba desvalijar la casa de la actual vicepresidenta en el barrio porteño de Balvanera, de donde escapó con 245 mil pesos y 50 mil dólares en efectivo, y varios objetos de plata.
Por el hecho, que recién ahora trasciende a la opinión pública, la Justicia imputó a David Juan Pablo Cruzado, oficial mayor de la Policía Metropolitana que se desempeñaba como custodio de Gabriela Michetti.
Al enterarse que la causa tomó estado público, Michetti difundió este domingo un comunicado a través de su cuenta en Facebook en el que aclaró que 200 mil pesos, que el ladrón extrajo de una bolsa de papel madera que se encontraba al costado de la cama, «pertenecían a donaciones» realizadas a la
Fundación SUMA que ella preside, con motivo de la cena anual de recaudación de fondos que se celebraría una semana más tarde.
En tanto, explicó que el monto de 50 mil en moneda extranjera guardado en un placard de su habitación tenía como origen un «préstamo» que le había efectuado su pareja, Juan Martín Tonelli Banfi, para ayudarla en el financiamiento de una maestría para su hijo.
Precisó además que otros 45 mil pesos que se llevó el delincuente de sus incursión en el domicilio ubicado sobre la calle Pasco al 600 tenían como destino el pago de una «refacción» en su casa, mientras que «el resto» lo atribuyó al «manejo cotidiano de una casa de familia».
Fuente: minutouno.com