Ayer, el Gobierno nacional festejó la salida del cepo cambiario para las personas físicas en la Argentina. La medida llega luego de confirmarse un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que agrega otros $20.000 millones de dólares nuevos a la deuda de $44.000 millones que ya había tomado Mauricio Macri en 2018. ¿Qué impacto tendrá esto sobre nuestra economía?
Todo esto lo hablamos con el economista Matías de Angelis, quien además es secretario de Hacienda de Monte Hermoso: «En el último tiempo surgieron muchas preguntas porque el común de la gente veía que el modelo se estaba agotando, particularmente este esquema de devaluación predeterminada del 1% mensual, pensando que iba a converger con la inflación al 1% con otras variables. Tras el fracaso de este esquema, el Gobierno quiso vender este acuerdo con el FMI como una fase 3 del plan cuando esto no es así, porque todo está plagado de incongruencias; en el primer día se devaluó un 12%«.
«Querían mantener la estabilidad hasta las elecciones y no pudieron, y por eso fueron al FMI. A eso le agregaron una flexibilización del cepo cambiario, que no llega a ser una quita porque la gente puede comprar pero las empresas no» Matías de Angelis.
En cuanto a la sostenibilidad en el tiempo de este esquema, el economista marcó que «el gran problema de la Argentina es que su economía pierde más dólares de los que ingresan. El FMI vino con un buen monto de dinero, pero si el Gobierno no arregla ese déficit de divisas, lo único que te da el desembolso es tiempo. El FMI obliga al Gobierno nacional a tomar medidas con el fin de cerrar ese agujero de dólares, y concentrarse en que ingresen más. Es lo que el FMI le puso como condición, y por eso se da este sistema entre dos bandas de $1.000 de piso y $1.400 de máximo por dólar, solo pudiendo intervenir de ser superada alguna de las bandas. Todo esto llega con el objetivo de acumular $10.000 millones de dólares de acá a fin de año. El problema es que, si en los primeros meses se sostiene una inflación creciente, en 4 meses volvés a tener atraso cambiario, la Argentina se vuelve a encarecer en dólares y suben las importaciones, haciendo que vuelvas a tener el mismo problema de la salida de dólares».
Por último, de Angelis concluyó que «no hay que creer que en los primeros días se determinan los próximos meses, hay mucha ansiedad y durante los próximos días el dólar puede quedar clavado cerca de los $1.250, pero con cualquier medida desacertada se llegaría rápidamente a los $1.400. Incluso para los exportadores no mejoró demasiado el tipo de cambio por el cual liquidan, teniendo en cuenta que ya estaban en $1.230. Los exportadores van a esperar que se acerque más a los $1.400, y los importadores van a estar comprando en $1.200. Con el pasar de los días, sin dudas el dólar se establecerá en $1.300. Si hay traslado a precios, tendremos tres meses de inflación en estos niveles, y si la devaluación queda en un 10/12%, volvés a la situación a la que empezaste, cosa que el Gobierno no quiere. Hoy el Gobierno está intentando que el ancla de la inflación sean los salarios, porque el dólar ya dejó de serlo».