En los próximos días el Banco Nación incrementará en un punto porcentual la tasa de sus créditos hipotecarios ajustados por UVA, lo que impactará en un encarecimiento de 10 por ciento en la cuota. Le seguirán los otros dos bancos públicos que controla Cambiemos, el Provincia de Buenos Aires y el Ciudad, e inmediatamente se acoplarán los privados. De esta manera, la posibilidad de acceder a la vivienda se dificulta ante la idea del Banco Central de controlar la inflación con la receta ortodoxa de subir la tasa de interés rectora del sistema financiero, la cual se ubica actualmente en un record de 28,75 por ciento anual, y la suba en los precios medidos en dólares de los inmuebles. Por cada punto de aumento de tasa de interés la cuota sube diez y en el mediano plazo los bancos esperan ajustar entre 1,5 y 3 puntos la tasa.
La falta de coordinación de la política económica del Gobierno, más específicamente entre la macroeconomía y la monetaria, se hace cada vez más evidente. Desde el Palacio de Hacienda pregonan una política crediticia laxa para el acceso a la vivienda, con lo cual impulsar la actividad de la construcción. Pero el titular de la Central, Federico Sturzenegger, busca compensar el impacto en precios de los tarifazos con política monetaria restrictiva. Es así que en las últimas dos semanas llevó a que confluyeran las tasas de pases bancarios y de Lebac a un 28,75 por ciento anual, al tiempo que endureció las normas de encajes para bajar la liquidez.
Con un sistema desregulado, el impacto de estas medidas no fue igual en las tasas pasivas (depósitos) como activas (créditos), subiendo mucho más las segundas. Mientras la tasa de referencia subió 2,5 puntos porcentuales, los rendimientos que pagan los plazos fijos minoristas a 30 días subieron en 1,3 puntos. Pero en el caso de los créditos el endurecimiento de la política monetaria complica el sueño de a casa propia.
La cuota de los préstamos hipotecarios ajustados por UVA aumentará un 10 por ciento promedio por cada punto que suba la tasa de interés que los bancos le aplican a ese coeficiente. Si se toma en cuenta esa dinámica, el ajuste de tasas previsto en breve para los tres bancos nacionales más la suba en los precios de los inmuebles, eleva la barrera de acceso a hipotecarios en casi 20 por ciento, según los ingresos necesarios para calificar al préstamo más accesible, a 30 años de plazo y por hasta un millón de pesos. En este caso la cuota pasaría de los 4490 pesos por mes actuales a los 6300 pesos.
El Nación oficializará una suba del 3,5 actual al 5 por ciento anual la tasa del préstamo hipotecario UVA para nuevos clientes y de 4,5 a 7 la denominada de mercado abierto, es decir para quienes no cobren por ese banco sus haberes ni tengan cuenta allí. El Ciudad prevé elevar del 5,4 al 6,4 por ciento la cuota, mientras que el Provincia de Buenos Aires (Bapro) deslizó que llevará de 5,9 a 6,5 por ciento esa tasa en las próximas semanas. En el caso de los privados el ajuste podría llegar a ser de hasta 3 puntos porcentuales.
Fuente: pagina12.com.ar