El caso de Loan, el chico de cinco años desaparecido el pasado 13 de junio en la localidad correntina de El Algarrobal, despertó un profundo debate sobre el tratamiento y las políticas de prevención de los casos de trata de personas llevadas adelante por el Estado nacional. En ese sentido, cobra especial relevancia el hecho de que la gestión de Javier Milei decidió tras su asunción en diciembre el cierre definitivo de todas las delegaciones del Comité Ejecutivo de Lucha en contra de la Trata y Explotación de Personas.
Marina Rollo fue la última delegada del comité en la sexta sección de la Provincia de Buenos Aires hasta su desmantelamiento. En comunicación con Radio Urbana, explicó que «el organismo fue creado por la Ley de Trata en el 2012. Dependía de la jefatura de Gabinete y contaba con un delegado en cada Provincia, y uno en cada sección electoral de la Provincia de Buenos Aires. Yo empecé como delegada en junio del 2023 con otra compañera, y en marzo de este año me llamaron para decirme que no iban a renovar el contrato. Un mes después pasó al Ministerio de Seguridad, perdiendo la articulación con el resto de los ministerios, y el tratamiento transversal que lo caracterizaba. Eramos aproximadamente 35 delegados en todo el país«.
«Lamentablemente, la especulación en los medios de comunicación con casos así es algo terrible, todos quieren la primicia o el mejor titular cuando hay familias detrás, y en el caso de Loan, la vida de un niño. Es feo ver cómo los medios se manejan en situaciones de crisis. Este tema hay que tratarlo con mucha responsabilidad, a veces en los medios por tener el titular se dicen cosas muy feas desde el desconocimiento» Marina Rollo.
¿Dónde radicaba la importancia de contar con una delegación en cada lugar? «Al estar en el territorio, uno puede atender más fácilmente las necesidades, y puede coordinar mejor con los ministerios y los municipios. Si bien la gente debe denunciar al 145, en casos particulares el Comité era el que se encargaba de denunciar ante el Ministerio de Justicia para así gestionar los rescates. También se acompañaba a la víctima con ayuda económica, un lugar para vivir, para que pueda insertarse en el mercado laboral, cualquier cosa desde la inmediatez y en el mediano plazo. También tenía la tarea de capacitar a funcionarios públicos sobre esta temática. Desde CABA no se puede controlar lo que pasa en todo el país. Por ejemplo, en el caso de Loan se actuó muy tarde; con un delegado en Corrientes se hubiese actuado mas rápido«.
Por último, Rollo se refirió a la situación particular que se vive en Bahía Blanca y la región sobre la temática: «En los últimos años, se hizo más común la explotación laboral en el campo, la explotación laboral, el grooming a menores de edad, o casos extremos donde adultos ofrecen a sus hijos para que abusen de ellos a cambio de dinero. Todo eso pasa en el sur de Provincia de Buenos Aires. Ante una sospecha de trata siempre hay que denunciar al 145. Igualmente, hoy la línea está funcionando a un 50% de su capacidad porque sufrió un recorte. Siempre que se crea que hay un riesgo de vida con un menor de edad, las primeras horas de desaparición son claves, y aún más en lugares fronterizos. Cuando hay una desaparición hay que denunciar inmediatamente».