Mara Recondo, integrante del Observatorio de los Derechos de las Personas con Discapacidad

Desde el Observatorio de los Derechos de las Personas con Discapacidad local denunciaron que se les denegó el derecho a participar del debate en el Concejo Deliberante a través de la Banca 25. La petición, que fue presentada en la última sesión por el bloque del Frente de Todos, no recibió los votos necesarios para ser aprobada.

Mara Recondo, integrante del Observatorio, reveló que el pedido fue ingresado el pasado 5 de mayo, y que fue denegado ya que concejales de las distintas fuerzas participan de las reuniones de ese espacio, a pesar de que «los representantes de Juntos fueron solo 2 veces, van más tarde y se levantan antes que termine. Al no darnos la Banca 25 vemos que quieren callarnos, y lo vienen haciendo hace un tiempo«.

Uno de los pedidos que se iba a presentar en caso de aprobarse la moción tenía que ver con que, según Recondo, de las 26 ordenanzas relacionadas con la accesibilidad de las personas con discapacidad, solo 4 están aplicadas efectivamente: «Solo se cumple la que marcó la creación del Observatorio y la que regula su funcionamiento. Luego, sobre la ocupación de la vía pública se cumple aunque denunciamos constantemente. La cuarta se empezó a marcar ahora, ya que Bahía Blanca se declaró una ciudad accesible para personas con autismo. Se han hecho varias ordenanzas, algunas en las que hemos participado, y ni siquiera se reglamentan. He corroborado una por una. ¿Para qué hacer una ordenanza si no le llega a la gente?» se preguntó.

¿Qué hace el Observatorio en cuanto a esta falta de aplicación en las ordenanzas? Recondo detalló que «hice 48 denuncias a los órganos pertinentes por infracciones a las ordenanzas vigentes. Cuando estaba Montanaro -ex director de fiscalización- el órgano era ese, ahora no conozco quien está; presento denuncias y ni siquiera llegan respuestas. Luego está el Tribunal de Faltas, cuyos procesos duran hasta un año».

Por último, la integrante del Observatorio resaltó las dificultades que atraviesa hoy una persona con discapacidad para desenvolverse normalmente por la ciudad de Bahía Blanca: «Es prácticamente imposible circular por la ciudad con silla de ruedas. Es hasta riesgoso. En una semana se cayeron dos personas, una ciega y otra en silla de ruedas. Yo vivo sorteando obstáculos con el riesgo que eso implica» concluyó.

«Hoy es muy complicado ingresar a un bar con una persona con discapacidad. Pocos tienen rampa de ingresos, hay mesas a las cuales una persona en silla de ruedas no se puede aproximar, no puede circular entre las mesas, mucho menos ir al baño» Mara Recondo.

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