El objetivo es que quienes incursionan en esa práctica eviten consecuencias indeseadas. Por eso, una ONG busca generar conciencia sobre la importancia de cuidar la identidad al hacerlo. “Mejor cubrirte ahora a no saber de qué disfrazarte después”, es el lema.
Con el objetivo de generar conciencia sobre la importancias de cuidar la identidad a la hora de mandar fotos íntimas o sexuales a través de dispositivos digitales, es decir, de sextear o realizar sexting, una ONG lanzará hoy la campaña #SexteaConLaCabeza. La campaña parte de la idea de que quien desee mandar fotos sexuales mediante las tecnologías de la información y comunicación (TIC) tiene la libertad de hacerlo y disfrutarlo. “Se entiende que Internet brinda nuevas posibilidades de sexualidad y de expresión que sirven para experimentar”, comentó a este diario, Ezequiel Passeron, integrante de Faro Digital, colectivo multidisciplinario que apunta a la construcción de una ciudadanía digital, y creador de la nueva campaña.
“Quienes estamos en El Faro comprendemos que el mundo digital es parte de la cotidianeidad de los jóvenes y que es propio de la adolescencia actual valerse de la tecnología para tener relaciones, comunicarse e incluso vivir las sexualidades. En ese sentido, la premisa de la campaña es disminuir los daños que puedan surgir como consecuencia del sexting”, explicó Passeron, quien era parte del Programa Nacional Con Vos en la Web, que trabajaba durante la gestión kirchnerista en el uso responsable de Internet, con campañas contra el grooming, entre otras acciones, y que fue desactivado por el gobierno macrista.
La campaña se compone de dos piezas, donde se muestran dos jóvenes, una mujer y un varón, en posiciones sensuales pero con máscaras de animales que les tapan la cabeza. Para su realización, Faro Digital trabajó en alianza con la agencia Cósmica (cosmicanet.com).
Una parte fundamental de #SexteaConLaCabeza es plantear la cuestión de género en esta temática, destacó Passeron. “Si bien son las mujeres las víctimas en la mayoría de los casos de divulgación de imágenes íntimas, son tanto ellas como ellos quienes deben tomar conciencia de los riesgos de exponerse o exponer a otro. Para trabajar esta cuestión de género se buscó modelos de ambos sexos y colores que no queden encasillados en un género”, apuntó. Y añadió: “Los posibles riesgos del sexting devienen de la divulgación de esas imágenes enviadas en forma privada. Se entiende que quien manda una foto o video sexual lo hace con el fin de que sea visto por una o varias personas específicas. Sin embargo, la vorágine propia de las tecnologías digitales hace que sea imposible predecir el camino que ese material tendrá ahora o en un futuro. En ese sentido, una foto o video pueden llegar a manos de desconocidos o de conocidos que no eran destinatarios originales de ese mensaje. Algo tan íntimo como la imagen personal con connotación sexual o sensual tiene que ser motivo de cuidado y preocupación. Por eso es mejor evitar exponer la cara o partes de nuestro cuerpo que nos identifiquen específicamente (tatuajes, marcas de nacimiento, etc.) para impedir que esa imagen llegue a donde no queremos”. Y concluyó: “#SexteaConLaCabeza es una invitación a explorar las sexualidades a partir de la tecnología sin dejar de cuidar una de las cosas más valiosas que tenemos: nuestra identidad.”
Fuente: pagina12.com.ar