El profesor de taller de escuela técnica Lisandro Sabbino se refirió esta mañana al desfinanciamiento que sufre la educación técnica a nivel nacional con la aprobación del Presupuesto 2026.
«El Presupuesto 2026, que fue votado por muchos senadores de muchos partidos, es una canallada a la educación técnica profesional, es virtualmente el camino a la destrucción de las escuelas técnicas«, expresó el también integrante de la Comisión Directiva del Suteba Bahía Blanca.
«En la educación técnica tenemos doble dependencia —explicó Sabbino—, la ley de Educación Federal provincializó la educación, y dependíamos de Nación como modalidad técnica. Este presupuesto derogó el articulo 52 de la ley de Educación Técnica que decía que el 0,2% del PBI iba a ser destinado a un fondo nacional para distribuir a las provincias para las escuelas técnicas. Eso nos permitía hacer los trabajos en las escuelas como soldaduras, impresoras 3d, de electricidad. Sin estos fondos nacionales, ¿de dónde van a salir los fondos? Porque las cooperadoras están en una mala situación y no se le puede pedir plata a las familias«.
Sabbino considera que se trata de «una decisión política de ir a una primarización de la economía del país». «En los primeros 18 meses de este mandato, los fondos del INET ya habían bajado un 76% de financiamiento, no estaba la ley que derogaba el financiamiento pero en términos prácticos, sí estaba. Si esto uno lo vincula con el cierre de empresas a nivel nacional, el trabajo precario y la baja tasa de empleabilidad, el ataque a los convenios laborales, no apostar por el desarrollo productivo, uno saca la conclusión que este gobierno y quienes lo acompañaron, tienen la decisión política de que este país se dedique a la extracción de recursos naturales y la exportación de materia prima, sin industria», agregó.
«El Presupuesto 2026 es una canallada, es virtualmente el camino a la destrucción de las escuelas técnicas» Lisandro Sabbino
«Este año se egresaron 400 alumnos de escuelas técnicas aproximadamente, ¿adónde van a ir a trabajar en este país si no se apuesta a la producción de materia prima?», se preguntó el docente, quien también afirmó que «es un sector que se sigue eligiendo, no alcanzan las escuelas para cubrir las demandas de las familias de inscribir a sus hijos en ellas».
Para terminar, dijo que «con los estudiantes no se habla de política partidaria pero sí se habla de decisiones, este tipos de cosas nos atraviesa y es discutido de manera transversal y, por la demanda de los estudiantes, debemos abordar el problema. Ellos son quienes sufren el problema y son parte de quienes salimos a buscar donaciones para los insumos para hacer las prácticas de taller. Entiendo que nos puedan tildar de alarmistas y de fondo está la expectativa de un pueblo y ciertos sectores, que nos han educado para que las decisiones las tomen quienes nos gobiernan, en pensar que algún tiro tiene que salir para el lado de la justicia. Estamos esperando que suceda y hay sectores que, detrás de esos discursos grandilocuentes, piensan que es el camino».
«Hay mucha desocupación, mucho trabajo informal, mucho hambre. Entiendo que la gente pueda tener expectativa pero este no es el camino», finalizó.
