La cartera laboral admitió que en diciembre retrocedió el empleo formal, mientras que la suba del total de trabajadores registrados en noviembre fue producto de la incorporación de 70 mil monotributistas para cobrar la Asignación Universal por Hijo (AUH). Los casos AGR y Banghó.
El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, reconoció ayer que el número de asalariados aún se encuentra lejos de las cifras de 2015 y que el aumento del empleo registrado a noviembre último se explica por monotributistas que se anotaron al sistema para cobrar el salario familiar. Su cartera había difundido el informe de la Situación y Evolución del Total de Trabajadores Registrados, el cual informó una mejora de 0,3 por ciento en el total del empleo registrado durante noviembre respecto del año previo, lo que representa 37.085 puestos. No obstante, el número de asalariados formales (sin contar los monotributistas) se retrajo en 69.629 empleos, un 1,1 por ciento. “Sube mucho autónomos y monotributistas. Esto tiene que ver con la decisión del Gobierno en abril último de que puedan recibir la Asignación Universal por Hijo (AUH). Esto permitió la formalización de muchos trabajadores como monotributistas”, aseguró Triaca en declaraciones radiales. El funcionario insistió en restarle responsabilidad a las medidas económicas y las grandes empresas por no cumplir con el compromiso de mantener las nóminas laborales. “No podemos pasar por encima de la ley”, aseguró Triaca, quien insiste en que su función es defender a los trabajadores.
En un intento por tratar de explicar las cifras de trabajo, el ministro del área aseguró que “lo importante es que cuando uno mira el empleo del sector privado, vemos que la suma de los asalariados, más monotributistas, más personal doméstico, más autónomos, en conjunto crecieron”. Sin embargo, en un desagregado de esa suma, los nuevos monotributistas que ingresaron para obtener el beneficio de la AUH aportaron 59.786 puestos, con un aumento de 4,1 por ciento interanual en noviembre. “También el empleo público en relación con el mismo mes de 2015 aumentó”, agregó. En este caso, explicó que la suba fue en distritos provinciales y algunos municipios, pero a nivel nacional descendió.
Las principales bajas dentro del grueso del empleo asalariado se produjeron en las actividades manufactureras y construcción. Sobre este último rubro, Triaca justificó la caída que registró en diciembre, según la Encuesta de Indicadores Laborales, en que se suele pagar el seguro de desempleo, que se integra con aportes durante el resto del año y se reintegra en el último mes. “Es un criterio técnico que lleva a que se vea una salida pero que se retoma la actividad en enero”, aseguró el ministro.
Falta de compromiso
El funcionario fue consultado por los incumplimientos que se registran en varias empresas respecto del compromiso de no despedir trabajadores hasta marzo. Al respecto, Triaca había manifestado que había que entender a las empresas. “Fue una titulación de una revista que no expresa lo que dije en ese párrafo”, aseguró, aunque luego justificó esa idea. “Hemos asumido un compromiso que pensamos que las empresas podían cumplir. Pero también hay sectores particulares donde hay empresas que no registran continuidad y en esos casos particulares es donde expresé eso”, sostuvo.
Sin embargo, los despidos no sólo suceden en pequeñas y medianas empresas como la firma de computadoras y tablets PC Arts, que produce bajo la marca Banghó, sino en grandes holding, como el Grupo Clarín. En el caso de los despidos de la imprenta AGR, de Clarín, Triaca aseguró que “es una empresa que manifiesta que no va a continuar con la actividad de esa unidad”. “Se ha avanzado en acuerdos y se están haciendo gestiones con la empresa para que podamos encontrar una solución a muchos de estos trabajadores. Pero si en el marco de la ley las empresas deciden cumplir con sus obligaciones con sus trabajadores, también tenemos un conjunto de herramientas que nos marca la ley. No podemos pasar por encima de la ley”, se excusó el ministro.
Otro caso sobre el que se refirió fue Banghó, que desde anteayer se encuentra en Conciliación Obligatoria, pero la empresa adelantó que no puede seguir produciendo computadoras bajo el nuevo régimen de arancel cero para la importación. “En el caso de Banghó, la incluimos en el programa de transformación productiva”, dijo Triaca. Según explicaron desde la UOM, la empresa se transformará en una importadora y sólo mantendría una dotación mínima para comercialización telefónica y servicio de postventa. Desde el gremio solicitaron una reunión para la semana próxima con autoridades de la Secretaría de Comercio y el Ministerio de Producción.
Fuente: pagina12.com.ar