Ismael Bermúdez, economista

Hoy se anunciará en la sede de la Confederación General del Trabajo (CGT) una exención del pago del impuesto a las ganancias por adicionales que alcanzara un total de 600.000 trabajadores y trabajadoras en relación de dependencia. En particular, los bonos por productividad, fallo de caja y conceptos de similar naturaleza; las retribuciones por movilidad, viáticos y otras compensaciones análogas; y las horas extras, adicionales por turno rotatorio y similares ya no contarán a la hora de pagar ganancias.

Así lo explicó el economista Ismael Bermúdez: «Los ítems que quedan exceptuados de ganancias son varios y dependen de cada trabajador, pro lo que es difícil de calcular la inversión que representa. El Gobierno estima que llegará a 600.000 personas. Van a generar grandes diferencias entre unos y otros trabajadores, que cobrando lo mismo algunos quedarán exentos y otros no».

«Hoy pagan ganancias un millón de trabajadores, y si esto llegara realmente a los 600.000, hoy solamente 400.000 pagarían ganancias. Hoy el piso de ganancias es de $404.062 en bruto» Ismael Bermúdez.

¿Qué tan amplio es el universo que representa? Según Bermúdez, «el 90% de los trabajadores no llega a ese valor, esto alcanza a un sector pequeño, pero la medida llega porque había una resistencia a hacer horas extras para no pasarse del límite de ganancias. Si bien es un sector minoritario, estaba trabando la situación de horas extras en muchas actividades como el automotor o la industria del neumático. Esto debería introducir una solución a ese problema»

Como contracara, agregó a esto que «algunos interpretan que, con esta jugada, Economía pretenda que las paritarias se firmen en un valor inferior. Si se toma esa medida, sería muy regresivo. Haría que ese 90% que no paga ganancias pase a tener un acuerdo paritario por debajo de la inflación».

A esta medida se suma una tercera edición del «Dólar Agro», que busca ofrecer a ese sector un tipo de cambio diferencial a $300 para asistir la producción en tiempos de sequía. Sobre ello, Bermúdez reflexionó que «estamos en una situación crítica, y una medida como la del dólar agro puede contribuir a una alta inflación porque los precios internos buscarán alinearse a los precios internacionales, va a haber una presión al alza de los precios domésticos».

En términos inflacionarios, el economista afirmó que «esta semana se va a conocer el índice de precios al consumidor, y estaría rondando el 7%. Y por cómo vienen los precios en abril, lo más probable es que esté igual. La sequía impactó también al modificar la oferta de bienes, hoy estamos teniendo una inflación que va a superar el 100% este año. Las consultoras dan entre 110% y 120%, y todos los meses lo vienen corrigiendo hacia arriba».

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