Esta semana, un medio británico reveló que la Federación Rusa llegó a un importante hallazgo de petróleo en la Antártida, justamente dentro del territorio que la Argentina toma como parte de su extensión en el continente. Según las primeras estimaciones, su magnitud sería 30 veces superior a la de Vaca Muerta. ¿Qué implicancias tiene este descubrimiento?
Guillermo Carmona, ex secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, aseguró en comunicación con Radio Urbana que «se publicó en un diario británico, ligado a las acciones del Gobierno. Es un importante descubrimiento de reservas hidrocarburíferas por parte de Rusia. Para la Argentina esto representa, en un primer plano, un carácter argentino de los territorios donde se produjeron los descubrimientos. Parte de nuestro territorio está en la Antártida según la ley. Si se descubre petróleo en ese sector, o cualquier otra cosa que ocurra allí, el Gobierno argentino debe tomarlo como un tema propio, más allá de las pretensiones de otros países sobre ese sector. Es muy preocupante que hasta el momento no haya habido ninguna manifestación de Cancillería al respecto».
«Ni el Tratado Antártico ni el protocolo ambiental tienen vencimiento. Este último establece que durante los primeros 50 años de vigencia, ninguna de las partes puede por si misma modificar el régimen que prohíbe las actividades extractivas. Para que eso ocurra debe haber un acuerdo del 100% de los países que integran el tratado. Eso se lee como que en el 2048 habrá una modificación pero esto no es así» Guillermo Carmona.
Carmona explicó a su vez que «el segundo plano de análisis tiene que ver con el tratado antártico, que establece que la actividad de los países en la Antártida tengan que ver con el desarrollo científico y la cooperación. En el actual contexto normativo no se pueden explotar esos recursos, aunque es muy relevante saber que allí hay grandes reservas de petróleo y minerales. El tercer plano es geopolítico. Rusia es una potencia naval mundial con capacidad de despliegue en todo el mundo, y venían haciendo referencia a la actividad en la Antártida. No hay que perder de vista las tensiones entre Rusia y Gran Bretaña, que hoy son muy grandes».
En ese sentido, el diplomático puntualizó que «Argentina es un actor principal en lo que tiene que ver con el tratado antártico. No hay forma de que el Gobierno argentino de mínima no pida información adicional, que no haya ninguna reacción. Desde lo diplomático no se puede seguir cediendo como ya lo vienen haciendo con Malvinas. La Argentina tiene que marcar la cancha y reafirmar su soberanía sobre el territorio antártico argentino».