El Gobierno anunció hoy el plan “Transparentar precios” que busca que los comercios informen el precio de contado y el financiado con tarjeta de crédito.» Ahora 12″ y «Ahora 18» continuarán.
El Gobierno nacional anunció hoy en conferencia de prensa la limitación de la financiación para las compras en cuotas sin interés. El ministro de Producción, Francisco Cabrera, y el secretario de Comercio, Miguel Braun, dieron a conocer el plan “Transparentar precios” que busca que los comerciantes informen en las vidrieras el precio de contado y el financiado con tarjeta de crédito que comenzará a regir a partir del 1 de febrero.
El Gobierno negó que el plan implique el fin de las cuotas sin interés si no que la idea es transparentar la diferencia de precio entre abonar la compra en un solo pago —efectivo, débito, transferencia y crédito— que en dos o más cuotas.
Cabrera habló en Davos con La Nación y explicó la medida: «Lo que haremos este mes es transparentar precios». «Tiene que ver con la confusión que generan las ofertas y los pagos con tarjeta que supuestamente no tienen interés. Vamos a pedirle al comercio que exprese cuál es el precio de contado y el financiado con tarjeta. Cuando se vean los dos, no van a ser iguales, porque uno tiene un interés implícito», explicó.
El cambio está en que los comercios no podrán discriminar un precio de pago en efectivo de un precio “de lista” si se opta por pagar con otra modalidad. Esto es porque al cobrar en efectivo, el comerciante se ahorra las comisiones de la tarjeta de débito —que es 1,5 %— o de crédito —del 3 %— y, además, evita las retenciones a cuenta de IVA en Ingresos Brutos.
La idea es y el propósito de la medida es doble. Por un lado, que la resolución lleve a que bajen los precios de los productos que se abonan al contado o en un pago. Por otro, el exigir que se explicite y discrimine los costos de financiamiento generará mayor competencia entre las tarjetas de crédito por bajar el interés, lo que “congelaría” los precios de los productos financiados.
Por supuesto que la medida no tiene el mismo impacto en pequeños y medianos comercios que en las grandes marcas, que tienen más posibilidades de absorber los costos de financiamiento que las tarjetas le cobran a los comerciantes. Sin embargo, en el Gobierno son optimistas.
según explicó Cabrera, esta medida busca «evitar que los intereses de financiamiento se trasladen a quienes pagan al contado» y que también sean transparentes «todos los costos involucrados en los pagos financiados con el fin de defender los derechos de los consumidores a acceder a la información».
Con todo, este cambio debería hacer que los precios de los productos que se abonan en efectivo, con débito o con tarjeta en un pago bajen. Mientras que el precio financiado debería mantenerse en los valores actuales.
¿Y el «Ahora 12» y «Ahora 18»?
Desde Nación ratificaron la permanencia de los planes «Ahora 12» y «Ahora 18». El tema es que ahora, el interés “implícito” que tenían deberá informarse. Todo depende desde dónde se lo mire: el Gobierno apuesta a que el precio en un pago va a bajar por lo que el precio del producto financiado seguirá igual que hasta ahora.
Los dos planes tienen una parte del costo financiero subsidiado, por lo que no recae íntegro en los comercios. Además, son un éxito, sobre todo en 2016.
«Ahora 12″ayudó a aminorar la caída en las ventas de comercios de indumentaria, calzado y marroquinería. «Ahora 18» hizo lo propio con el consumo de teléfonos celulares, electrodomésticos de línea blanca, computadoras y tablets.
Fuente: elpaisdigital.com.ar