En las últimas horas, tanto el poder Legislativo como el Judicial frenaron las intenciones del Presidente Milei de desguazar el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA): La semana pasada, el Congreso de la Nación dejó sin efecto el decreto que modificaba la estructura del organismo, mientras que el Juzgado Federal de San Martín avaló la vigencia de la derogación del mismo. Aún así, el Gobierno nacional avanzó en el pase a disponibilidad de alrededor de 400 empleados.
Federico Castoldi, director del INTA Bordenave con jurisdicción en los partidos de Puán, Saavedra, Tornquist, Bahía Blanca, Coronel Rosales, Monte Hermoso y Coronel Pringles. En comunicación con Radio Urbana, destacó que «en nuestra región en particular no tuvimos despidos, pero sí compartimos la situación de incertidumbre en la que vivimos desde 2023. El Gobierno nacional avanzó con un decreto que quiso esconder como ‘modernización y eficiencia’ lo que en realidad es un ajuste. Además, elimina la autarquía del organismo que funcionaba a través de un consejo directivo, y que ahora pasa a tener un cargo político elegido a dedo. Ante este avasallamiento, tanto Diputados como Senadores dijeron no con dos tercios de los votos, cuestión que fue confirmada en dos instancias judiciales. Aún así, en los últimos días se puso en disponibilidad a los trabajadores del INTA que habían ingresado por concurso«.
«Me encantaría acompañar la transformación del Estado, pero jamás puede hacerse de forma tan prepotente, pasando por encima de todo. Además, este no es un caso aislado; todo el sistema científico argentino está siendo atacado de la misma forma» Federico Castoldi.
En ese sentido, el profesional marcó que «el Gobierno nacional se comporta en la ilegalidad, a lo que se suma que hace dos años que no se presenta un presupuesto, por lo que manejan de manera arbitraria todos los fondos. Avanzaron en lo que quisieron, cambiaron el tipo de gobernanza del organismo pasando de un ámbito colegiado a un sistema político. Incluso nos sacaron el CUIT, por lo que no podemos hacer compras o pagar los servicios. Es importante recordar que en el ámbito científico, los resultados a abordar son siempre de mediano y largo plazo, velando por el desarrollo del país. Estos cambios conspiran con las ganas de nuestros científicos de quedarse en los organismos públicos, siendo profesionales muy valorados en el ámbito privado nacional e internacional. Muchos miembros del INTA están migrando al sector privado por este desgaste«.
Finalmente, Castoldi agregó que «poniéndolo en un ejemplo concreto, uno de los últimos integrantes de INTA Bordenave que se fue tenía un sueldo que valía por un quinto de lo que podría ganar en el sector privado. Esa es la situación en la que vivimos y trabajamos. Hoy la gente del INTA, así como de las universidades nacionales y el CONICET, no trabaja por el salario, sino que lo hace para contribuir al desarrollo del país. Y lo hacen aún en este contexto, cuando es el mismo Estado nacional el que bastardea y desprestigia a nuestros organismos«.