Según fue anunciado, el Gobierno nacional pondrá en marcha en los próximos días el plan de privatización de las rutas nacionales. La medida llega tras la publicación del decreto 28/2025, que crea el programa de ‘Red Vial Nacional’. En ese sentido, en el plazo de un año deberán realizarse las licitaciones para «la construcción, explotación, administración, reparación, ampliación, conservación, mantenimiento y prestación de servicios al usuario y para la realización de nuevas explotaciones complementarias o colaterales que permitan obtener ingresos adicionales».
Fabián Catanzaro, secretario general del Sindicato de Vialidad Nacional a nivel país, aseguró que «esto se había anunciado en octubre del año pasado, al mismo tiempo que salió un proyecto similar en cuanto a la concesión de los trenes. Se trata de la concesión de 10.o00 kilómetros de vías divididos en dos partes; en primer lugar de la ‘Ruta del Mercosur’ que ya está licitada, y una segunda etapa donde se licitarían 6.000 kilómetros más que hoy están en manos de Corredores Viales S.A. Estas concesiones no deberían pagarle ningún canon al Estado, se hacen cargo y listo. Además se abre la puerta a que puedan explotar los costados de las vías y que sea una fuente de ingreso para las empresas. Sumado a esto, las empresas no tendrán las obligaciones de hacer grandes obras, ni carriles nuevos, ni rotondas, nada. Por último, para presentarse para licitar un corredor por 30 años, se necesitan solo los avales bancarios, sin demostrar tener capacidad técnica ni empleados».
«Alertamos que estamos yendo por un camino que ya fracasó. El estado actual de las rutas tiene que ver con estas concesiones durante los ’90. Vemos que la idea es facilitar y allanar el camino a las empresas, y que esto sea un negocio alejado de la cuestión técnica y el beneficio del usuario» Fabián Catanzaro.
¿Cuáles serán los beneficios para los usuarios que día a día transitan las rutas nacionales? «En principio, lo recaudado en los peajes sería destinado simplemente a bachear y realizar tareas de mantenimiento básicas. Las obras que hoy están paralizadas no serán reactivadas por las empresas, así como tampoco las ampliaciones. Por eso creemos que tendríamos un primer año de licitaciones que solo tienen que ver con el mantenimiento, el bache0 y el estado de las rutas, pero muchas de ellas requieren intervenciones más grandes. Vemos esto y no podemos aclarar en qué nos beneficiamos nosotros como usuarios, no hay mayores especificaciones».
Refiriéndose particularmente al impacto de esta medida en nuestra ciudad, Catanzaro detalló que «hoy hay obras en Bahía Blanca como la de Paso Urbano que está totalmente paralizada, y la decisión de no avanzar más del 45% que en el que está es del Gobierno nacional. A eso se le suma una decisión de tener un presupuesto acotado en materia de obra pública, como el año pasado donde fue subejecutado un 40%. Ese dinero no se destinó a las obras, lo que se suma a la cuestión política de no hacer las obras y hacerle pagar a los gobernadores provinciales por su postura política. Es mentira que con esto ahorramos dinero, porque lo que nos estamos ahorrando en infraestructura y mantenimiento de obras luego nos saldrá entre tres y cinco veces más caro rehabilitarlo. Nos estamos endeudando al futuro y tirando a la basura toda la inversión realizada».