Las altas temperaturas que hay durante esta temporada arrojan una de las más altos en la historia del país. Particularmente los índices de la ciudad y la región superarán los records históricos de temperaturas máximas en casi todas las localidades
Bahía Blanca cuenta con una de las temperaturas más altas en el país, con 41° durante el día de hoy, esperando 33° para mañana, 42° el miércoles, 44° el jueves y el viernes 43°. Recién las temperaturas comenzarán a bajar la semana que viene aunque desde el lunes los valores ascenderán nuevamente a 30°.
El licenciado en Ciencias de la Atmósfera, Carlos Zotelo, aseguró que esta situación se presenta en medio de una ola de calor que afecta a gran parte de Argentina, principalmente a las zonas norte y centro. “Lo particular de esta ola de calor no pasa por los registros térmicos que se obtengan, sino por la extensión tan al sur en que se darán estos valores extremos como Bahía Blanca, Médanos, Stroeder, norte patagónico e inclusive Las Grutas. Por otro, la cantidad de días en los que las temperaturas en esta regiones rondarán los 40ºC”, dijo el licenciado.
Sobre los causantes de esta ola de calor, el licenciado Carlos Zotelo indicó que “la sucesión de días con cielos despejados y la historia térmica con días previos cálidos son alguna de sus causas”. Al mismo tiempo, “se encuentran dos centros de baja presión ubicado a la altura de Mendoza y otro sobre el océano Atlántico, que favorece el ingreso de aire muy caluroso y seco desde zonas tropicales”
Esta ola de calor trae dos problemas asociados; en primer lugar el consumo energético. Pensemos que la zona afectada por este fenómeno incluye ciudades con alta concentración poblacional (AMBA, La Plata, Rosario, Córdoba, Mar de Plata, Santa Fe).
“Luego, desde el punto de vista productivo, el problema de la falta de precipitación en muchas localidades del sudeste Bonaerense, La Pampa, sur de CBA y algunos sitios puntuales de Santa Fe afectará sensiblemente el contenido de humedad de las capas superficiales del suelo, que, de por sí, ya están bastante afectadas”, explica el licenciado.
Sumado a esto “hay que pensar en el stress animal”, asegura, y menciona que esta vez no resulta algo menor ya que puede traducirse en cambios en los patrones de alimentación, por ejemplo.