La pandemia del coronaviurs expuso drásticamente un problema estructural que tiene la Argentina y el mundo: la distribución de la riqueza. Hablamos con Andrés Cappa, economista del Observatorio de Coyuntura Económica y Políticas Públicas: «Hay un problema y es que la riqueza está, el tema es cómo se distribuye».
«En nuestro país encontramos que hay una concentración del ingreso brutal. Cuando vemos que la pobreza es de 40%, y los ingresos son por debajo de la canasta básica, es muy preocupante. Pero no a todo el mundo le afecta por igual la pandemia, hay un pequeño porcentaje de la población que sale indemne en este contexto, y esto se mide a través de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH). Hay un 1,4% de la población del cual si se le saca un tercio de sus ingresos, nos alcanza para eliminar totalmente la pobreza por ingresos».
«Definimos la Línea de Riqueza como aquella que delimita el ingreso necesario para eliminar la pobreza. Es decir: cuánto habría que redistribuir para que ninguna familia quede por debajo de la línea de pobreza. La “Riqueza” se plantea como un concepto relativo a la pobreza, para la cual utilizamos la metodología del INDEC: son pobres aquellas personas cuyos ingresos se encuentran por debajo de la Canasta Básica Total», explicó el economista.
Según un informe del Observatorio de Coyuntura Económica y Políticas Públicas (OCEPP), «el Ingreso Total Familiar (ITF) medio de los hogares ricos supera en $113.753 a la línea de riqueza. A esa diferencia se la llama “brecha de riqueza”. Por el otro lado, a los hogares pobres le faltan, en promedio, $16.553 para alcanzar la canasta básica total, lo que se denomina ‘brecha de pobreza'».
El INDEC señaló que la pobreza en Bahía Blanca durante los primeros seis meses del 2020 alcanzó un 33,7%, lo que implica un crecimiento de casi 9% puntos con relación al año anterior. En tanto, la tasa de indigencia fue del 4,4 % del total en la ciudad.