Finalmente, se llevó adelante el día de ayer la última sesión ordinaria del 2025 en el Concejo Deliberante en la que, entre otras, se aprobó la Ordenanza Fiscal Impositiva para el ejercicio 2026. El oficialismo consiguió 15 adhesiones a la iniciativa que plantea distintas exenciones impositivas a ciertos grupos, mientras que plantea una contribución de empresas petroquímicas y cerealeras de la ciudad para financiar 13 obras pluviales en diferentes barrios.
Álvaro Diaz, presidente del bloque de concejales de Fuerza Patria, marcó que «después de varias jornadas de discusión, charlando con el secretario de Economía, con concejales opositores y de nuestro espacio, logramos sancionar estas ordenanzas con 15 votos, que son casi dos tercios de los concejales. Creo que es muy válido lo que hizo el intendente de dar la discusión con las empresas, en un principio sin pedir permiso pero luego negociando de buena fe con quienes tienen una mayor capacidad contributiva. Por este trabajo es que se llegó a buen puerto, con un Ejecutivo que entendió que los pedidos eran razonables, haciendo que el proyecto se modifique y se vuelva a presentar».
«Dentro del proyecto se creó una comisión compuesta por distintos concejales para hacer el seguimiento de las obras establecidas, diseñadas y presentadas que tendrán financiamiento por esta contribución. Fue uno de los pedidos de la oposición a los que accedimos» Álvaro Diaz.
En cuanto al debate generado sobre la modificación de las tasas municipales, el edil afirmó que «notamos una doble vara en ciertas personas que son libertarias en el orden nacional, y prácticamente bolcheviques en lo local. Acá no hablan de costos, no hablan de la quita de subsidios al boleto de transporte, de la Zona Fría, no piden costos a empresas que distribuyen luz y gas, no se preocupan por la situación de quienes cobran $900.000 y pagan $700.000 de alquiler; hoy esas mismas personas tienen un ataque por defender el bolsillo del bahiense. Vi planteos muy conservadores, contrarios a lo que defienden al mismo tiempo cuando se refieren a temas de alcances nacional, donde parece que vienen a modernizar todo. El ABL como lo conocíamos estaba roto, era vetusto. Con esa tasa, el Municipio podía costear tan solo el 22% de los servicios prestados. Proyectando esto, en cinco años íbamos a depender casi totalmente de la tasa de Seguridad e Higiene a empresas del polo petroquímico».
¿Cuáles son alguna de las modificaciones más importantes que plantea esta ordenanza? Díaz detalló que «hasta el año pasado, el 80% de la ciudad pagaba lo mismo de ABL, independientemente de ser un vecino que vive en un sector con menor capacidad contributiva, menos servicios e infraestructura u otro que viva en barrios más establecidos. Ese sistema de tasas era regresivo, cuestionado por muchos municipios con grandes responsabilidades y pocas herramientas. Ahora se tomará de referencia los metros cuadrados del terreno construidos, impactando de manera más justa. Buscamos que la tasa de Servicio Urbano sirva para modernizar y dar mejores servicios al vecino, que es lo que se reclama».
