Según el Mercado de Liniers entre el lunes y miércoles se comercializaron 13.100 animales mientras que la semana pasada fueron 19.275, una baja del 47%. Los ganaderos decidieron no enviar su hacienda hasta tanto el dólar se estabilice. Hablamos con Alberto Williams de la Cámara de Industria y Comercio de Carnes: “La devaluación trajo como consecuencia la suba de todos los productos. Esto no es culpa de los carniceros ni los matarifes. Es imposible pararlo. La devaluación trajo como consecuencia la suba de todos los productos. Esto no es culpa de los carniceros ni los matarifes. Es imposible pararlo. Esta devaluación de esta semana fue tremenda, la gente no tiene plata en el bolsillo. Los jubilados no pueden comprar un kilo de carne».