Tras su visita al penal de Alto Comedero donde Milagro Sala se encuentra detenida desde hace un año, el exjefe de Gabinete Alberto Fernández consideró que existe una «clara animosidad del poder político de Jujuy» contra la líder de la Tupac Amaru, de quien dijo que debería estar libre porque la asiste el «principio de inocencia» hasta que «se pruebe lo contrario».
En diálogo con Radio 10, el dirigente del Frente Renovador marcó como una situación procesal irregular el hecho de que sólo esté privada de la libertad la dirigente social kirchnerista y hayan quedado afuera de la lupa de la Justicia los intendentes que entregaron los fondos para la construcción de viviendas que supuestamente no fueron construidas.
«¿Por qué (Sergio) Schoklender está libre y Milagro está presa? ¿Por qué los intendentes por dónde pasó el dinero no están en la causa? La única explicación que hay es que existe respecto de Milagro Sala una clara animosidad del poder político de Jujuy que tiende a someterla», analizó.
En tanto, Fernández coincidió con la lectura suscrita por el kirchnerismo y algunos sectores de la izquierda respecto de que la detención sin condena de Sala es una suerte de acción aleccionadora sobre el conjunto de la dirigencia opositora y el movimiento popular, para mantener a raya la protesta.
«Al Gobierno de Jujuy le sirve para ofrecer una suerte de mentamensaje a los opositores para decirles `ojo con lo que hacen porque les puede pasar lo que le pasó a Milagro Sala`», recalcó el dirigente massista.
Según sostuvo, «en la legislación argentina el principio de inocencia rige hasta que se pruebe lo contrario», por lo que «una persona tiene derecho a estar en libertad mientras el proceso se sustancia».
Fernández aclaró que su visita a Sala no se debió a compartir una ideología en común ni ser «socio político» de ella, sino para «preservar el Estado de Derecho, que es algo que costó mucho» recuperar luego de la dictadura militar.
«Cuando una persona está injustamente detenida, toda la sociedad como tal debe sentirse resentida. Esto lo hago por todos. Lo hago par preservar el estado de Derecho que es algo que nos costó mucho. Le toco a Milagro pero le puede tocar a cualquiera», reflexionó.
Y agregó: «Cuando flexibilizamos los criterios legales y empezamos a permitir estas cosas, el riesgo es muy grande. Que Human Rights Watch haya vuelto a poner en una lista de países que detiene ilegalmente a la gente, a mí me parte el alma. A la Argentina, que fue modelo de juzgamiento de la dictadura, ¿cómo se entiende que esto esté pasando?».
El sábado, Fernández visitó a Sala en el penal donde se encuentra recluida: sostuvo que su detención «es arbitraria», al tiempo que le pidió al gobernador Gerardo Morales «que no cometa el error de persistir en esto».
El dirigente del Frente Renovador se expresó así minutos antes de ingresar al penal en el que Sala está detenida desde enero pasado, hecho que fue cuestionado por organismos internacionales y que tiñó de polémica las sentencias dictadas en su contra la semana pasada por la Justicia jujeña.
«Estoy convencido que la detención de Milagro Sala, a quien es la segunda vez que voy a ver y con quien seguramente tengo más diferencias que coincidencias, es una detención arbitraria», afirmó el exfuncionario nacional.
Al respecto, precisó: «Desde que la Argentina suscribió al Pacto de San José de Costa Rica todos tenemos derecho a soportar un proceso en libertad y sólo podemos ser encarcelados cuando las condenas están sobre nosotros».
«Yo no puedo hablar de la inocencia o culpabilidad de Milagro Sala pero sí puedo decir que creo profundamente injusta esta detención preventiva», agregó Fernández, quien dijo que fue al penal a expresarle su «solidaridad».
En declaraciones a la prensa, el dirigente massista le pidió al gobernador de Jujuy «que no cometa el error de persistir en esto porque va a convertir a esto en una mácula de su gobierno».
Fuente: ambito.com