En el Gobierno no descartan que haya más modificaciones de ministros. Según trascendió, está en duda la continuidad del secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco. En Justicia, el secretario de Planificación Estratégica, Mauricio Devoto, deja su cargo.
El presidente Mauricio Macri les tomará juramento hoy a los nuevos ministros de Salud y Agroindustria y nadie se anima en el Gobierno a asegurar que serán los últimos cambios en el Gabinete. Algo es seguro: habrá modificaciones en segundas y terceras líneas de ministerios como parte del plan de recorte de gastos con el que el Presidente quiere eliminar unos 600 cargos. Los rumores apuntan ahora al secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, quien podría dejar el cargo en medio del escándalo por las confesiones de su hermano en el FIFAgate. “Son solo rumores”, desmienten cerca de Burzaco, quien tiene una prolongada enemistad con la ministra Patricia Bullrich. En tanto, dejará su cargo el secretario de Planificación Estratégica, Mauricio Devoto, quien asumirá como embajador ante la Asociación Latinoamericana de Integración (Aladi) y el Mercosur.
Hoy el Presidente concretará los dos cambios de gabinete que se anunciaron luego de las elecciones. Dejará ir (por segunda vez) a Jorge Lemus y asumirá en su lugar la persona que venía interviniendo virtualmente el Ministerio de Salud hace ya demasiados meses: Adolfo Rubinstein. También partirá Ricardo Buryaile que será reemplazado por el presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, como ministro de Agroindustria.
Nadie se anima a confirmar que serán los últimos cambios de gabinete que emprenderá Macri, aunque los que normalmente son mencionados como candidatos a irse fueron confirmados. Por caso, en la cúpula del Gobierno ratifican al ministro de Medio Ambiente, Sergio Bergman, quien varias veces fue mencionado entre los posibles salientes, pero resiste bien agarrado cual hombre disfrazado de enredadera.
Los rumores en Casa Rosada se concentran ahora sobre Eugenio Burzaco, sobre el que confluyen una serie de factores. El primero y principal es el escándalo del FIFAgate que involucra a su hermano, Alejandro Burzaco, quien en estos días admitió ante la Justicia estadounidense el pago de coimas. Varios funcionarios del gobierno nacional colaboraron con la fianza del hermano de Burzaco y reunieron –según publicó Perfil– unos cuatro millones de dólares. El ministro de Modernización porteño, Andy Freire, habría colaborado con 50 mil dólares, según detalló el portal Nueva Ciudad. El caso de su hermano tiene muy preocupado a Eugenio Burzaco.
Según los rumores –hasta ahora, no confirmados– la salida de Burzaco sería un cruce entre la exposición pública del FIFAgate y la decisión más general de Macri de recortar entre un 15 y un 20 por ciento de los cargos políticos en cada ministerio. También sería un triunfo de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien nunca hizo buenas migas con Burzaco y conseguiría así desplazarlo tras lograr ser confirmada en su cargo en medio del caso Maldonado. Según pudo saber este diario, la ministra es una de las más entusiastas impulsoras de esa salida que –de todas formas– debe ser resuelta por Macri. “Son solo rumores”, señalaron en el entorno de Burzaco. Quizás todo quede en nada. Quizás no.
Otros ministerios tienen guardadas bajo llave las áreas que piensan sacrificar cuando los convoque el trío de funcionarios que está evaluando los recortes en el Gobierno: los coordinadores del Gabinete, Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, y el ministro de Modernización, Andrés Ibarra. En Justicia, quien dejará su cargo es el secretario de Planificación Estratégica, Mauricio Devoto, que irá a una embajada. Las reuniones para definir qué cargos se pueden sacrificar se irán sucediendo en las próximas semanas. Los macristas insisten en que el ajuste no implicará despido de empleados públicos, aunque los gremios estatales se mantienen en alerta.
Fuente: pagina12.com.ar