En el marco de la Convocatoria de Proyectos de Desarrollo e Innovación Tecnológica (CyTEB II: Ciencia y Tecnología en Energías Bonaerenses), un proyecto de la UTN Facultad Regional Bahía Blanca relacionado con el desarrollo de energías renovables será financiado por la Comisión de Investigaciones Científicas de la Provincia de Buenos Aires. Se trata de una iniciativa que busca aprovechar la energía de las olas del mar (energía undimotriz), una fuente renovable abundante y aún poco explotada en la Argentina.
Franco Dotti, investigador adjunto y director del proyecto, resaltó que «la energía undimotriz es un tipo de energía tomada del oleaje, y no está explotada a gran escala en ninguna parte del mundo. Es algo nuevo, que apunta a capturar la energía que tienen las olas en movimiento, algo que estaría muy bien aprovechar porque tiene muchísimo potencial. En ese sentido, el primer escollo es que hay que poner un convertidor de energía en el mar, siendo un ambiente muy hostil. Si bien hay cientos de prototipos de dispositivos, hoy no es claro cuál es la mejor tecnología para explotar el recurso. Nosotros venimos desarrollando un convertidor de energía que esté flotando y mueva un mecanismo para generar energía eléctrica. Es algo novedoso que no está aplicado en ambiente real en ninguna parte del mundo».
«Argentina podría ser pionera en esta tecnología en un futuro; debemos tener esa visión, y estamos contentos que desde la Provincia de Buenos Aires compartan este punto de vista» Franco Dotti.
En ese sentido, el investigador agregó que «esta tecnología está pensada para la explotación a gran escala, como si se fuese a instalar una planta termoeléctrica en el medio del agua. Por lo pronto, esa posibilidad aún está muy lejos; los desarrollos son incipientes y se están haciendo pruebas preliminares. Lo ideal sería colocarlo en el medio del océano con olas de 7/8 metros, pero es algo inviable por la lejanía a cualquier centro urbano para monitorear o hacer tareas de mantenimiento. Instalar una planta de energía en el medio del agua es muy difícil. En Argentina, lo más conveniente sería instalarlo en los mares de la Provincia de Buenos Aires, que potencialmente pueden generar buena energía y está cerca de grandes ciudades, pensando en una instalación a gran escala».
Por último, el investigador aseguró que «el financiamiento a este proyecto representa algo muy importante, permitiéndonos sostener nuestro trabajo de laboratorio por los próximos tres años. Venimos trabajando en conjunto con el Puerto en la implementación de un aparato de estos a pequeña escala. Ahora, con el financiamiento Provincial, vamos a trabajar en el desarrollo de un sistema de control autónomo para el sistema. En una época tan difícil para la ciencia, donde el Estado nacional a cambiado la manera en la que entiende la importancia de la investigación, para nosotros es buenísimo que el aporte llegue desde el Gobierno provincial«.