Este sábado se llevó adelante en la Plaza Rivadavia una Gala Lírica abierta a todo el público en la explanada del Palacio Municipal. El Coro Estable y la Orquesta Sinfónica Provincial, ambos dependientes de los Organismos Artísticos del Sur (OAS), ofrecieron a las y los vecinos obras de reconocidos compositores en un espectáculo que duró más de una hora y media en el espacio público. ¿Cuál es el balance del 2025 que pueden hacer desde este organismo?
Sebastián Berenguer, coordinador de los OAS, marcó que «teníamos muchas expectativas con esta gala porque para nosotros es atípico llevar adelante un programa abierto al aire libre. La Orquesta Sinfónica debe tener ciertas condiciones climatológicas para poder tocar, porque abajo de los 17 grados hay instrumentos que se pueden quebrar como un Oboe. El impacto cultural en la comunidad fue extraordinario, superando ampliamente nuestras expectativas con una participación que superó las 2.500 personas. Fue una gala lírica increíble e histórica; no recuerdo a la Orquesta ni al Coro tocando en el Palacio Municipal iluminado de fondo».
✨ Una noche para el recuerdo en las escalinatas del Palacio Municipal
🛕La explanada del Municipio se convirtió en escenario abierto para un encuentro que reunió emoción, música y comunidad.
🎶Una celebración del arte después de un año dificil, donde volver a encontrarnos… pic.twitter.com/1fEgqI0GET
— Federico Susbielles (@fsusbielles) November 30, 2025
«Fue una jornada increíble que nos merecíamos como bahienses, marcada por la música, la alegría, el color y la familia, con la posibilidad de encontrarnos con el otro después de un año tan difícil y angustiante luego de la inundación. Brindar alegría en ese contexto no es poca cosa» Sebastián Berenguer.
En ese sentido, el artista valoró la posibilidad de llevar adelante una actividad de estas características en el espacio público: «Hacerlo al aire libre tiene un doble valor, porque se valoriza más tanto al artista como al equipo técnico y al espectador. El espacio público atrae y el artista se encuentra con el espectador; podemos ensayar y que suene divino, pero si no vienen a vernos no existe el hecho teatral. Es increíble volver a la calle, es un lugar de un gran impacto cultural. Buscamos generar ese impacto en aquel que pasó por la Plaza y se quedó porque estaban la Orquesta y Coro. Hay mucha gente que no nos conoce, y en ese sentido fue pura ganancia».
¿Cuál es el balance del año? «Fue un año muy difícil, extremadamente atípico por lo que significó la inundación del 7 de marzo. Nosotros como organismo perdimos nuestra sede que es el Teatro Municipal. Ahí ensayábamos con el Ballet y la Orquesta, además de tener nuestros talleres y áreas técnicas. Se inundó y lo perdimos por completo, así como también mucho material técnico invaluable como herramientas, sogas, cajones de los contrabajos, y lamentablemente perdimos el Arpa, un instrumento único. Fue muy difícil porque teníamos grandes expectativas, pero gracias a una gran resiliencia, en mayo consolidamos del inicio de la programación. Hoy llevamos 40 funciones y más de 20.000 espectadores, con un 2026 que ya está programado».
