El Instituto de Investigaciones Económicas y Sociales del Sur (IIESS-CONICET) lanzó un informe basado en una encuesta sobre el endeudamiento en los hogares de Bahía Blanca. Entre alguno de los datos más relevantes, destaca que dos de cada tres hogares ha tomado créditos o préstamos, mientras que uno de cada tres está atrasado con el pago de sus deudas.
Francisco Cantamutto, economista e investigador del IIESS-CONICET, expresó que «desde el 2020 venimos trabajando sobre el endeudamiento bahiense bajo la misma metodología, con el fin de encontrar continuidades y cambios en el tiempo. Desde ese primer momento notamos como continuidad que los hogares en Bahía Blanca manejan sus finanzas en permanente deuda, algo que ya no es anómalo. Ahora, que esto sea la nueva normalidad no quiere decir que siempre sea la misma deuda: En un contexto de alta inflación podía tener más sentido sacar créditos incluso para consumos básicos, era una estrategia lógica. Ahora, en un contexto de inflación decreciente sin esa constante suba de los salarios pasa a ser una situación menos racional».
Según una Encuesta 2025 sobre Endeudamiento de Hogares de Bahía Blanca, 1 de cada 3 hogares se atrasó en el pago de sus deudas, mientras que 2 de cada 3 tomaron crédito o solicitaron préstamos.
Los hogares perdieron acceso al crédito o lo gestionaron de manera conservadora. 👇 pic.twitter.com/gLMwtKQ7nM— IIESS UNS – CONICET (@IIESS_CONICET) November 12, 2025
«Todas las consecuencias que marcamos en el informe se ven incrementadas en aquellos hogares cuyo sostén económico es una mujer, que son especialmente vulnerables. Además, esta dependencia de los sostenes sociales de cada familia hace que los mejores parados socialmente tengan más posibilidades» Francisco Cantamutto.
En ese sentido, el economista marcó que «en este tiempo la proporción de créditos es similar, pero es llamativa la modificación del tipo de deuda que se toma. La cantidad de crédito nuevo disminuyó siguiendo la suba de las tasas de interés. Hoy mucha gente quisiera acceder a nuevos créditos pero no puede hacerlo porque crecieron los atrasos. Los hogares bahienses no pueden pagar sus tasas, servicios y deudas en la tarjeta de crédito. Otra cosa que ha pasado desde el 2024 es que los hogares han recurrido mucho más a los ahorros, a vender algún activo. Pero cuando eso se termina no hay más, y las familias caen a tener que buscar créditos a familiares o amigos, a las redes de contención. El Estado no aparece y solo queda una ayuda de gente cercana; si algo se mueve un milímetro de lo previsto, se arruina la economía familiar».
Finalmente, Cantamutto destacó que «la encuesta no tiene que ver solo con la deuda, sino que también consultamos sobre la carga laboral y los ingresos familiares. Es una mirada más amplia que cotejamos luego con las estadísticas del INDEC. Los hogares bahienses reportaron que, ante la caída de los ingresos, salen a buscar un segundo/tercer trabajo. También vale destacar que en medida que se amplia la jornada laboral, el estrés de los activos se vuelve inmanejable, y las problemáticas relacionadas a la salud mental son insostenibles. Todos los hogares primero cortan los gustitos´ como ir a cenar o salir de vacaciones, aunque en algunos casos se empieza a recortar en la cantidad o calidad de comida, y no es una pavada».
