Según un informe de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), el consumo de carne en la Argentina está proyectado en los peores números de los últimos 110 años. El informe compartido revela que el consumo finalizaría en 44,8 kilos por habitante este año, por debajo del peor número registrado hasta el día de hoy de los 46,9 kilos de 1920. ¿Cómo impacta esto en nuestra ciudad?
Sergio Vitale, titular del Frigorífico ‘Vitale’, detalló que «si bien hay una baja en el consumo de carne este año, en nuestro caso la vemos cerca del 20%. No tengo estadísticas concretas, pero lo que más se nota es que la gente busca otras alternativas como la carne de pollo o cerdo, que en comparación con la vacuna es más barata. Aún así, hace como ocho meses que la carne vacuna prácticamente no aumenta, pero el salario real no es acorde a ningún precio».
«La baja en el consumo no incide todavía en la capacidad productiva del frigorífico, pero todos los insumos han aumentado mes a mes entre un 4% y un 10%. La luz, el gas, el combustible para el transporte, el costo del frio también es caro» Sergio Vitale.
¿Cómo sostienen el funcionamiento en este contexto de caída en las ventas? «Lo que buscamos es otra alternativa. En la parte frigorífica hacemos faenas a animales propios pero también cobramos ese servicio de faena a animales ajenos. Buscamos reincorporar ese 20% perdido con otras tareas, y siendo más eficientes con las tareas de entrega y logística. Tenemos una plantilla de 30 empleados, y el trabajo debe hacerse con esos 30 empleados. Buscamos ser más operativos en todas las áreas: el frio, consumo de gas y luz, del gasoil, la logística, operamos de manera puntillosa. Si bien todo afecta, no es tan grande la distorsión que tuvimos en la venta como otros frigoríficos más grandes que pueden haber visto números más preocupantes».