El Ministerio de Seguridad ya nos tiene acostumbrados a estas desprolijidades. Pero esta vez, el exabrupto fue mayúsculo: en el día que se conmemoraban los 15 años del atentado a las Torres Gemelas, el secretario de Seguridad, Eugenio Burzaco, reconoció una supuesta «inquietud oficial» ante la influencia que los terroristas del Estado Islámico podría tener en el país. «Mediante un trabajo profundo hemos detectado argentinos que se han formado en ISIS. Y eso es algo que realmente nos preocupa, porque sabemos que han estado en zonas calientes del conflicto, en Siria o el norte de Irak», afirmó el funcionario en declaraciones a un medio de la provincia de Misiones. En ese sentido, añadió que «hay ciudadanos que han ido y han vuelto al país o a países vecinos como Uruguay».
Ante la temeraria afirmación del viceministro, el periodista misionero se vio en la obligación de repreguntar si existían datos concretos sobre la denuncia que hablaba sobre un supuesto grupo que entrenaba extremistas en el norte de la provincia de Corrientes. La respuesta de Burzaco no hizo más que sumar confusión: «No, no. No pudimos confirmar algo concreto con respecto a ese caso», expresó. En la entrevista, el funcionario relató que «estamos con los ojos abiertos en ese tema, recomponiendo relaciones con los vecinos de la región, cuestión clave en el tema de la seguridad en la región». Según pudo saberse, uno de los tres kamikazes que no llegó a inmolarse en el atentado que el año pasado dejó 137 muertos en Francia habría hecho una llamada a un número argentino, reveló el Servicio de Inteligencia europeo. Muchas de esas llamadas fueron encriptadas por Viber, Telegram y WhatsApp por donde se acordaban pasajes, hospedajes y dinero. Según precisó el informe, todo era coordinado por Abu Ahmad, jefe de Amn al Kharji.
Al respecto, el analista internacional Claudio Fantini aseguró que tal vínculo telefónico aún «no implica que haya células activas en nuestro país». Y agregó: «La comunidad musulmana en Argentina siempre ha sido ejemplar». No obstante, reconoció que «hay que investigar ese número de teléfono» para descartar una posible amenaza.
Autodesmentida
Las declaraciones de Burzaco causaron conmoción y estupor, incluso filas adentro del Gobierno. Sobre todo porque, luego del reportaje, el segundo de Patricia Bullrich se desdijo a través de un comunicado en el que afirmó todo lo contrario a lo que había insinuado en la publicación periodística. «No se ha detectado la presencia de miembros de ISIS en Argentina, ni de una de sus células. Ante la reciente denuncia que mencionaba la posible existencia de miembros de ISIS en Corrientes, a través de las fuerzas de seguridad seguimos esa línea de trabajo y al momento no se encontró nada que indique su presencia en nuestro país», aseguró Burzaco. En cuanto a sus declaraciones a un medio local durante su visita a Misiones, el Secretario aclaró que hizo una «apreciación general y que hizo referencia a esa línea de investigación». El comunicado cierra con un insólito y desubicado llamado: «Queremos llevar tranquilidad a la ciudadanía, estamos trabajando de manera permanente, intercambiando información con agencias internacionales e incrementando los controles en los aeropuertos y en los pasos fronterizos».
Para el ex secretario de Seguridad Sergio Berni, este tipo de afirmaciones sin una investigación que las avale son «una locura». El funcionario kirchnerista que antecedió a Burzaco en ese cargo dijo a Ámbito Financiero: «si algo tan grave como lo que declaró este hombre fuera cierto, lo único que no hay que hacer es contarlo en una entrevista periodística, porque se genera un pánico en la sociedad civil que debe evitarse, sin ir más lejos mi mama -que vive frente a una de las mezquitas porteñas, me llamo asustada luego de mirar esta noticia en la televisión y no quiere salir a la calle».
Fuente: ambito.com