La economista del IIESS, Lucía Diaz, realizó una tesina sobre las políticas habitacionales implementadas en Bahía Blanca y puso el foco sobre las asimetrías en la expansión urbana. En su investigación, advirtió la existencia de una clara desigualdad de las condiciones de infraestructura y hábitat entre el sur y el norte de la ciudad.
Sobre los resultados de su análisis, Lucía Diaz dialogó con Radio Urbana. Para su tesina, la economista tomó los datos de las últimas dos gestiones municipales, es decir los períodos de gestión del intendente saliente Héctor Gay. «Es una radiografía de la actualidad, un diagnóstico de lo que sucede en materia habitacional en la ciudad».
En 2016, señaló Díaz, «Bahía adhiere a la Ley de Acceso Justo al Hábitat, que da un montón de herramientas para que cada municipio ponga en marcha para resolver cuestiones de informalidad urbana». Es por eso que investigó los usos que se le dio a esta ley desde el Estado municipal para resolver el crecimiento de los barrios populares, principalmente ubicados en el sector sur de la ciudad. «Según el relato de diferentes entrevistados, fue muy poco lo que se pudo avanzar. Muchos señalaron problemas burocráticos entre el municipio y la provincia. También hubo muchos problemas con ABSA y el faltante de agua».
Ante la falta de un plan estratégico y un código urbano actualizado, Bahía Blanca muestra un avance desigual sobre la periferia, difuso y de baja densidad, con un sector norte de mejor infraestructura y uno sur, hacia el estuario, de carencias habitacionales. ?? pic.twitter.com/mpau6uhOPx
— IIESS UNS – CONICET (@IIESS_CONICET) November 28, 2023
Frente a la falta de respuestas, arrojó la investigación, se dan soluciones improvisadas como la toma de tierras. «La gestión estatal no llega a tiempo para solucionar la falta de viviendas. Bahía tiene muchas tierras nacionales que quedan vacantes y el municipio no las puede movilizar, entonces son ocupadas en diferentes momentos de crisis. Es mucho más costoso regularizar la toma de tierras que resolver el problema habitacional».
Por último, Díaz señaló que la falta de infraestructuras no es el único factor a tener en cuenta al momento de garantizar el derecho a la vivienda digna. «El hábitat también significa que una persona se pueda desarrollar plenamente. Al momento de urbanizar, hay que tener en cuenta de que se necesita un hospital o una salita médica, una escuela».