El Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria al paro anunciado para mañana por el sindicato de La Bancaria a nivel nacional. El mismo tenía por motivo el cierre indiscriminado de sucursales, puntualmente de los bancos Santander Río, Galicia y Supervielle (este último no tiene presencia en Bahía Blanca).
A ello se refirió Fernando García, secretario general de La Bancaria local, en comunicación con Radio Urbana: «Estos bancos se están achicando para maximizar ganancias, los bancos están ganando tan bien como siempre mientras achican gastos de estructura, alquiler, comunicación, pagos de luz, de gas. A la vez, todo esto deriva hacia los canales digitales».
Por ejemplo, el sindicalista detalló que «Santander cerró en Bahía Blanca tres sucursales de las cuatro que existían, quedó una sola. Parece que tiene más ganas de ser una fintech que un banco, está dirigiendo todo su negocio hacia ahí. Santander tenía sucursales algunas alejadas del centro lo cual estaba muy bueno para fomentar la inclusión financiera. Es importante la nacionalización de este tipo de conflictos para poder visibilizar la problemática. Entendemos que las sucursales físicas son necesarias, siempre tienen una gran afluencia del público».
«Sumado a todo esto, también están incumpliendo el convenio colectivo de trabajo. Negociamos nuestra paritaria mes a mes y nos quieren pagar muy por debajo de la inflación de octubre. No nos pueden poner como excusa que no tienen dinero porque sabemos que no es así, no pagar lo que la inflación diga es una práctica desleal» Fernando García.
A su vez, García marcó que esto genera dos problemas: la reducción del personal en las sucursales, aumentando las cargas laborales de los trabajadores que quedan, y la proliferación del teletrabajo: «Los compañeros están muy presionados en cuanto a su trabajo, falta gente. Hemos tenido compañeros con ataques cardíacos por la presión. En Capital Federal han cerrado sucursales porque solo quedaban atendiendo dos personas. Santander ha cerrado 90 sucursales a lo largo del país. Urgentemente necesitamos más personal«.
En ese sentido, agregó que «cuando cierran una sucursal utilizan varios mecanismos con los trabajadores, usualmente la reubicación, el teletrabajo, u ofrecimientos de mutuo acuerdo. Muchas veces la presión es tal que los trabajadores terminan eligiendo un monto para dejar de llevar adelante sus actividades».