Eduardo Donza, investigador del Observatorio de la Deuda Social Argentina de la UCA, conversó con Radio Urbana sobre el panorama laboral en Argentina y la ciudad, a partir del informe que publicó el observatorio sobre el período que va del 2003 al 2002. «El promedio de ingresos el año pasado fue de $79.600. En 2010 era de $115.000. Nos fuimos acostumbrando a una tendencia de baja de los ingresos».
Según el informe, en las últimas dos décadas la Argentina consolidó el fenómeno del «trabajador pobre», donde tener un empleo no garantiza escapar de esa categoría. «Un 30% de los trabajadores ocupados viven en hogares en situación de pobreza. En 2002 había un 50% de población en situación de pobreza, eso mejoró hasta 2009, 2008. Tuvimos un crecimiento a tasas chinas y generación de empleo de calidad, pero no pudimos sostener ese crecimiento y tuvimos años de estancamiento y caída del ingreso».
Un 30% de los trabajadores ocupados viven en hogares en situación de pobreza
La principal causa de este fenómeno, explicó Donza, sería el impacto de la inflación en los salarios. «La inflación es un problema endémico. Uno va al comercio y no sabe si algo es barato o caro. Perdimos la noción de los precios».
La movilidad social ascendente era natural en Argentina. Ahora eso se rompió. Hay un 20% de la población que se encuentra en un núcleo duro de la pobreza». Esto significa que esas personas son la tercera generación de sus familias en vivir en situación de pobreza y no han visto los frutos del esfuerzo y el trabajo de sus padres.
En este sentido, el informe resalta que los trabajadores del sector informal con malas condiciones laborales tienen muchas más chances de ser pobres. «Tenemos la mitad de los trabajadores sin aportes para la seguridad social y un tercio de los trabajadores siendo parte de la economía social. El país tiene problemas estructurales con la producción y el desarrollo, eso no permite crear empleo de calidad».