El líder del Frente Renovador reunió a sus cinco precandidatos a gobernador en un multitudinario acto. Presentaron un nuevo lema y definieron el sistema de selección de candidatos. «Le vamos a ganar al que pongan, se llame Juan, Pedro o Cristina», prometió
«Todos juntos somos invencibles», arengó Sergio Massa a los más de mil dirigentes de toda la provincia de Buenos Aires que se reunieron el sábado a la tarde en la Sociedad Alemana de Gimnasia de Villa Ballester para respaldar el documento político que el Frente Renovador llevará como programa bajo el lema «Somos el cambio justo».
Tras las acusaciones que tensionaron el espacio por la selección de los precandidatos a gobernador bonaerense, el mensaje fue de unidad. No sólo en las palabras, sino también en las imágenes: los cinco postulantes (Francisco de Narváez, Darío Giustozzi, Felipe Solá, Mónica López y Jesús Cariglino) se sentaron juntos tanto en el asado del almuerzo, como en el plenario de dirigentes y el multitudinario acto de cierre.
En principio estaba previsto que Massa sólo clausurase el encuentro. Pero, pasadas las 15, sorprendió hasta a sus propios colaboradores y tomó el micrófono para inaugurar el plenario de dirigentes que habían sido convocados para escuchar el análisis de los consultores del Frente Renovador: Antonio Sola, el renombrado español especialista en campañas electorales, se encargó de explicar «la mentira de que Massa cayó en las encuestas»; Miguel Peirano hizo un análisis de la economía; el muy aplaudido Aldo Pignanelli detalló el plan para construir 1.200.000 viviendas; Diego Santillán desarrolló la cuestión de la seguridad y Gustavo Iaies dio un panorama educativo.
Luego, pasaron todos al polideportivo para el acto principal. «Voy a terminar con el club de los jueces sacapresos de (Eugenio) Zaffaroni», prometió Massa ante una ovación generalizada. La disposición del escenario había sido cuidadosamente pensada: en primer plano se lo veía al candidato presidencial sobre el atril y detrás a los cinco precandidatos a gobernador bonaerense junto quien fue el encargado de organizar toda la jornada, el intendente de San Martín Gustavo Katopodis.
Su discurso estuvo centrado sobre todo en posicionarse como la «avenida del medio» entre Mauricio Macri y el kirchnerismo. «No soy un heredero del Estado ni un delegado de los empresarios. Soy un hijo de la democracia y de la clase media», fue una de sus frases que más aplausos levantó. Convencido de que la propia Presidente también se postulará a un cargo, el líder del Frente Renovador también le dedicó unas palabras: «No nos va a asustar ninguna candidatura, llámese Juan, Pedro o Cristina. Le vamos a ganar a quien nos pongan enfrente».
El candidato presidencial prometió que el próximo 1° de Mayo, Día del Trabajador, hará su primer acto del año en un estadio. «Vamos a convocar a reventar una cancha para llenar de esperanza la Argentina», aseguró. Minutos antes, Katopodis se había encargado de abrir el acto y aseguró que en el predio había más de 20.000 personas. Muchos habían quedado fuera del polideportivo por falta de espacio.
De la cumbre de San Martín tenían que salir también los mecanismos de aprobación de los candidatos a gobernador e intendentes de toda la provincia. Al terminar el día, estaban ya delineados pero faltaban detalles para su definición.
Como adelantó Infobae esta semana, el llamado «Comando Provincia de Buenos Aires. Massa Presidente» será el encargado de oficializar los precandidatos a gobernador. La idea es todavía que haya «dos o a lo sumo tres» fórmulas en las primarias del 9 de agosto. Todos en el massismo dan por hecho que Francisco de Narváez y Darío Giustozzi tienen un lugar asegurado. Si queda un lugar, deberá ser disputado entre Cariglino, Solá y Mónica López.
El comando estará integrado por 15 dirigentes. El viernes, los nombres no habían terminado de ser definidos, aunque ya estaban confirmados los diputados Facundo Moyano y Graciela Camaño, los legisladores bonaerenses Ramiro Gutiérrez y Patricio Hogan, el economista Aldo Pignanelli y los intendentes Gabriel Katopodis (San Martín), Mario Meoni (Junín) y José Eseverri (Olavarría), según confirmaron a Infobae fuentes que participaban del armado.
La estructura de la «Mesa Provincial del Frente Renovador» que deberá encargarse de aprobar las candidaturas en cada municipio estaba en un estado más nebuloso. La idea es que cada sección electoral tuviera entre cuatro y cinco dirigentes encargados de aprobar las listas, con excepción de la primera (que tendrá ocho) y la octava (que tendría a cargo sólo al economista Jorge Sarghini por su menor tamaño geográfico).
Antes de que los militantes y la prensa llegaran al predio de Villa Ballester, Massa compartió un asado con los precandidatos a gobernador y los intendentes bonaerenses. En su mesa estaban Katopodis, por ser el anfitrión, y los cinco aspirantes a suceder a Daniel Scioli. La organización de las mesas y sus manteles blancos provocaron alguna comparación con la disposición que suele usarse en los casamientos. Alguien incluso hizo sonar unas estrofas de la marcha nupcial. Ese es el clima que se vive por estas horas en el massismo.
Fuente: Infobae