En la Península Mitre, al Este de Tierra del Fuego, se encuentra el Refugio de Puerto Español, uno de los pocos territorios de nativa naturaleza viva en el país. El Refugio que se aloja al fondo de la paradisíaca Bahia Aguirre está habitado hace tres años por Sergio Anselmino, un fotógrafo y explorador que regala su soledad a cambio de pasar sus días en aquel mítico lugar.
Él mismo lo arregló luego de encontrarlo en condiciones muy precarias, y esta vez lo recibió su amigo Diego Promenzio, con quien soñaron desde el año pasado fundar una biblioteca en ese lugar. Diego es Arquitecto y también se autodefine como viajero. Vive con su familia en Bahía Blanca pero su sueño migrante lo impulsa a viajar más de 1821kms en línea recta directo al extremo sur argentino.
Mientras Sergio se ocupa de la construcción de estantes, repisas y muebles, Diego se encarga de recolectar libros. Sergio diseña su proyecto en una de las 3 habitaciones que tiene el refugio, y Diego reúne varios voluntarios. Sergio vuelve realidad una estructura tan soñada con los escasos medios que tiene ya que la ferretería más cercana se encuentran a más de 200kms de los cuales casi la mitad son ineludiblemente a pie. Por otra parte, el grupo que armó Diego le pone un nombre a la biblioteca y piensa un logo.
El proceso que duró ocho meses culminó con una emotiva inauguración el 23 de enero de este año. La nombraron Biblioteca Peninsula Haush, en honor al extinto pueblo originario de la zona de El Refugio.
El viaje que empredieron para llevar las donaciones de libros a la biblioteca ubicada en el faro del fin del mundo, duró cuatro días. Llegaron a Puerto Español en el velero «Sarah V. Worverk» del holandés Henk Boersma. Arribó al Refugio Diego junto a su hermano Fernando y su sobrino e ahijado Bruno. “La emoción se agigantó cuando vimos el trabajo y compromiso del otro”, dijo Diego.
Así fue que, entre aves, zorros, caballos y toros salvajes merondeando por ahí, más la presencia de solo 4 personas; 3 bahienses y un cordobés, se inaguró formal y oficialmente la Biblioteca Peninsula Haush. “Elegimos a Bruno de 17 años para que, en representación de las futuras generaciones, sea quien corte la cinta y dé por inaugurada la Biblioteca, quizás la más austral del país”, confesó el arquitecto bahiense.
“Un sueño parecido casi a una utopía resulto ser compartido”, dijo Diego con la satisfacción de haber cumplido, y alentó seguir donando libros; “porque esto recién empieza”, dijo.
La historia de la Bahía Aguirre
“La Bahia Aguirre fue testigo de varios de los principales sucesos históricos de la Tierra del Fuego; desde el paso de Futz Roy quien le dio el nombre a la tragedia de Allen Gardiner y su gente, hasta un intento de crear una Colonia en los años 40’s y 50’s del siglo pasado, la cual finalmente no prosperó, pero quedan allí restos del viejo Aserradero y criadero de Zorros y Bisones, de la familia Seefeld”, dijo Promenzio quien estudió las pocas huellas que pasaron por aquel territorio casi inhóspito.
“También hubo una ocupación años después, y de ahí quedó una vieja Casa que fue restaurada increíblemente por Sergio donde funciona también un museo creado por él mismo con objetos encontrados en la zona”, agregó.
Hoy en día, el sitio se transformó en parada obligada para aventureros y aquellos que se atreven a una de las caminatas más extremas; «La vuelta a pie a la Península Mitre», un recorrido de más de 400kms por el medio de una naturaleza tan bella como inhóspita, donde se atraviesan turbales, acantilados, ríos, bosques, mucha fauna, playas de piedras, y a cambio, uno de los mejores paraísos argentinos.