El Centro Regional de Estudios Económicos de Bahía Blanca (CREEBBA) generó como todos los meses el índice de variación de los precios en nuestra ciudad. Allí, obtuvieron que la inflación creció un 2,7% en relación al mes pasado, alcanzando un acumulado este año de 36,3%, mientras que la interanual se ubicó en un 49,5%.
Sobre esto, Gonzalo Semilla, economista director del CREEBBA, destacó que «vemos un número un poquito inferior a agosto, que fue 2.9%. El otro dato es que desde abril de este año estamos pasando por un proceso de desaceleración. Allí tuvimos un pico del 5,2% y luego fue bajando. Cuando uno ve la tendencia desde abril hasta ahora podría seguir a la baja pero no creo que sea muy sustancial».
Pensando en el análisis diferenciado de los distintos rubros económicos, el aumento más grande se dio en bienes y servicios varios (6,6%). Allí, Semilla aclaró que «encontramos casi 14% de aumento en peluquería, 5% en tocador, 5% en cigarrillos: Esos son los grandes aumentos de ese capítulo». Luego, educación, esparcimiento, salud y alimentos y bebidas arrojaron subas mayores al promedio. El economista focalizó en esto último: «La lupa está siempre en alimentos y bebidas. En este caso superó el promedio de inflación, y viene dando por arriba en los últimos tres meses. Impacta siempre en las familias más vulnerables y allí es donde el Gobierno quiere realizar acuerdos con supermercados».
¿Cómo sigue la relación entre los salarios y los precios? Semilla mencionó que «al Gobierno le interesa dominar la inflación y que los sueldos crezcan. Desde el 2018 hasta el 2020 tuvimos tres años de caída del salario real. En 2019 tuvimos 59% de inflación. El Gobierno está logrando calmar el ritmo inflacionario y ajustar un poco el salario. Si no baja la inflación tienen que subir los salarios«.
Por último, El director del CREEBBA arrojó sus estimaciones para los 3 meses que quedan de 2021. Dijo, en relación a la eventual suba de salarios, que «cada vez que hay ingresos, eso va a consumo y presiona la demanda subiendo los precios. Un dato no menor es que diciembre siempre es un mes más turbulento en cuanto a precios. Si las proyecciones siguen este camino, a fin de año quizás terminemos entre un 45% o 50% de inflación«.