Un desarrollo del IADO brinda importantes resultados en tratamientos de pacientes con coronavirus. Para conocer de qué se trata hablamos con el Dr. en Ingeniería, Alejandro Vitale quien además es Investigador Adjunto del Conicet y Profesor en la Universidad Nacional del Sur (UNS).
«Encontramos equipos importados que permiten hacer terapias mecánicas; fuimos desarrollando un equipo sin necesidad de usar una turbina ni sistema de electroválvulas y generamos un equipo que mezcla todos los elementos y regula la temperatura con sistemas descartables».
El Instituto Argentino de Oceanografía puso sus capacidades técnicas al servicio del Hospital Municipal de Agudos Dr. Leónidas Lucero de Bahía Blanca y, junto al Servicio de Clínica Médica, logró un innovador equipo para brindar terapias con Cánula Nasal de Alto Flujo de Oxígeno.
El dispositivo, de bajo costo y de producción local, comenzó a utilizarse en octubre y presentó alentadores resultados al utilizarse en pacientes con Neumonía Grave por Covid-19. El 77% de los ingresados a los que se brindó el tratamiento tuvieron buena evolución y recuperación. Además, permitió un ahorro estimado de 24 camas para la Unidad de Terapia Intensiva y de 360 días de cama de terapia, entendiendo que un paciente que ingresa a esta área tiene un promedio de 15 días en la unidad.
«La diferencia con los equipos importados es que es un proceso es manual regulado por personal de salud y se reducen costos», valoró el ingeniero Alejandro Vitale.
Además, agregó más detalles sobre su funcionamiento, «se puede controlar sin entrar necesariamente a la habitación. Se alivia al paciente porque está consciente, entonces se descomprime un respirador y una cama de terapia intensiva».
Según explicó el investigador, el equipo denominado Sistema Facilitador de Alto Flujo consiste en un calentador, con doble censado de temperatura (base y cánula), conectividad USB y controlador de flujo que se conecta a las tubuladuras de oxigenoterapia de alto flujo convencionales y permite aportar oxígeno humidificado y calentado a un flujo incluso superior a 60 lt por minuto. Este es un dispositivo en el cual se usan muchos de los elementos para transportar oxigeno con el que cuentan los hospitales públicos y de esta manera, se podría aplicar la terapia de alto flujo con cánulas nasales en cualquier repartición estatal sin mayores complejidades.
“Actualmente estamos trabajando en una nueva versión del dispositivo, con conectividad WiFi y bluetooth, para realizar los controles sin ingresar a la habitación y disponer de un registro continuo de la operación del equipo. Esta mejora brindará mayor seguridad para los pacientes y permitirá prevenir contagios del personal de salud», finalizó.