El día de hoy por la mañana se llevó adelante una manifestación por parte del Sindicato de Trabajadores de la Industria del Gas, Derivados y Afines de Bahía Blanca (STIGAS) frente a la Planta de TGS de Puerto Galván. La medida se complementó con un paro de 26 horas que comenzó el jueves.
Sobre esto, el Secretario de Actas y Prensa del Sindicato, Ariel Martín, explicó que “Este año hubo 5 reuniones con la empresa donde se negociaron 5 puntos convencionales, de los cuales no se atendió ninguno”. A partir de esta situación y luego de una asamblea virtual en la que se votó, se llegó a la decisión desde el sindicato de tomar la medida de fuerza.
En cuanto al trabajo realizado durante la pandemia, “Fuimos declarados esenciales, trabajamos durante toda la pandemia sin posibilidad de hacer teletrabajo. Muchos compañeros se contagiaron. El 2020 para nosotros fue un año muy complejo, al declararnos esenciales tuvimos que adaptarnos a todos los protocolos” aclaró Martín.
El Sindicato representa a 600 trabajadores de distintas regiones de las provincias de Buenos Aires, La Pampa y Rio Negro, 300 de los cuales trabajan en Bahía Blanca. Sobre el rol local en la producción de gas a nivel nacional, Martín mencionó que “A veces la sociedad no toma conciencia de la importancia que tiene Bahía Blanca en la producción gasífera de nuestro país, que tiene algunas de las empresas más importantes de toda la Argentina. El Polo Petroquímico está instalado acá en bahía por el nodo gasífero que representa la ciudad”.
Explicaron desde el Sindicato que las empresas locales son líderes en la producción de líquidos del Gas Natural, las mayores transportadoras y distribuidoras del gas en Argentina. Además, revelaron que Bahía Blanca produce diariamente 6.000 toneladas de productos derivados del gas natural (etano, propano, butano y gasolina), poniendo a la ciudad en la cabeza de la producción gasífera nacional.
Por último, en cuanto a la tarea por abordar de aquí en adelante por el Sindicato, Martín contó que “El Ministerio de Trabajo dictó ahora conciliación obligatoria, por lo que los próximos 15 días tenemos que estar en negociaciones. Es una buena señal que ambas partes cedan en algunos temas, no creo que las empresas se sigan manteniendo en la negativa. Somos un sindicato muy democrático, todas las decisiones se toman por asamblea, corren por cuenta de los afiliados”.