Durante cuatro años, científicxs del Conicet,liderados por Diego Rayes y María José De Rosa hicieron una investigación para determinar qué efectos tiene sufrir estrés prolongado en el organismo. Para ello, utilizaron un modelo de gusanos, Caenorhabditis elegans, que fueron los protagonistas del estudio para determinar los mecanismos moleculares, que pueden relacionarse con el del humano, y otros animales. Hablamos con Diego Rayes doctor en biología del Conicet.
“Así como nosotros liberamos adrenalina, en su respuesta de huida o lucha el sistema nervioso de estos gusanos libera tiramina. Y si bien esa tiramina en el gusano es importante para que el animal pueda escapar de un predador, cuando esa liberación se perpetúa impide que las células que tendrían que responder al estrés ambiental respondan. Por esa razón se produce ese efecto que se ve en todos los animales, perjudicial para la salud, y que viven menos».
“Entender estos mecanismos podría permitir ver si se pueden modular los efectos de algún modo. O sea, no podemos prevenir que haya activación de respuesta al estrés continuo, pero probablemente se puedan diseñar fármacos para aminorarlo”