La batalla opositora, hasta hace algunas semanas, era ver quién parecía más amigable para el electorado, más confiable de cara a un cambio de gobierno nacional, más preparado para hacerse cargo de un gobierno que desde la óptica antikirchnerista tenía demasiados hechos repudiables, por no decir casi todos. Las elecciones porteñas cambiaron el eje. La misma noche de la ajustada victoria de Horacio Rodríguez Larreta, Mauricio Macri salió a bendecir las virtudes de tener una aerolínea estatal, asignaciones y jubilaciones para todos, y parte del discurso opositor pareció tambalear. Lo malo ya no era tan malo, de hecho parecía bueno. La disputa dejaba de ser todos contra uno, sino también de uno contra los otros de una misma vereda.
«Yo no tengo problemas de coherencia ni necesito ahora acercarme al gobierno», cuestionó ayer Ernesto Sanz el drástico cambio de imagen que plantea el líder del PRO para el final de su campaña presidencial, según consignó Tiempo Argentino. «Yo llevo 12 años parado en el mismo lugar frente al kirchnerismo, sigo donde siempre estuvo», agregó el presidente de la UCR, otro antiguo crítico de la Asignación Universal por Hijo que supo acomodar su texto para hacerlo más amigable.
Sanz estuvo ayer en Tucumán, donde se encontró, sin planificarlo, con otro precandidato presidencial: José Manuel de la Sota, que competirá en la interna de Una Nueva Alternativa con Sergio Massa. En la provincia norteña, el senador radical llevó adelante una serie de actividades junto al candidato a gobernador José Cano, y así como aprovechó los micrófonos para marcar diferencias con Macri también mantuvo las suyas con el gobierno nacional. «La mejor estrategia para terminar con los abusos y conseguir el cambio es tener ideas, honrar tus valores y ser coherente, eso es lo que me piden en todo el país 40 millones de gurúes», aseguró Sanz, ironizando sobre el cambio de imagen que en el macrismo pergeña el asesor Jaime Duran Barba.
Otra aliada de Macri en el frente Cambiemos, Elisa Carrió, ya había cuestionado el nuevo perfil del alcalde porteño. «Estoy convencida de que no se puede hacer pro-kirchnerismo de parte de la oposición si quiere ser alternativa de gobierno», dijo días atrás. La diputada, precandidata presidencial, competirá en las Primarias del 9 de agosto con el jefe de Gobierno PRO y el senador radical.