EL PJ Bonaerense se reunió en Costa del Este, con presencia sindical – Pablo Moyano y Baradel a la cabeza- y algunos faltazos del kirchnerismo. Según su presidente, el duro comunicado contra el gobierno contiene las miradas de todos los sectores, aún de los ausentes.
El peronismo de la provincia de Buenos Aires es el más importante del país: por cantidad de afiliados, por la dimensión del distrito electoral más poblado, por su capacidad para adelantar las tendencias que se vienen en el seno del PJ nacional. En cierta medida esto explica por qué la cumbre del consejo del justicialismo bonaerense en el hotel boutique Almarena, ubicado frente al mar en la coqueta localidad turística de Costa del Este, que se realizó este viernes, había generado cierta expectativa.
La otra razón del suspenso era el malestar que había causado en un sector del justicialismo provincial –el kirchnerismo, sobre todo- algunos encuentros del actual presidente del partido, el intendente de Merlo Gustavo Menéndez, con autoridades del gobierno nacional. Para los hombres más cercanos a Cristina Fernández, la foto más irritante había sido la del 28 de diciembre en la Casa Rosada, con Menéndez, Martín Insaurralde y Diego Bossio reunidos con Rogelio Frigerio y Nicolás Massot. Una escena que tuvo lugar apenas 10 días después de la aprobación de la polémica Reforma Previsional.
Con estos antecedentes como telón de fondo, Menéndez ratificó en Costa del Este su pretensión de convertirse en el articulador de una reunificación partidaria que incluya a Sergio Massa, ausente por encontrarse en Estados Unidos, y también a Florencio Randazzo. El eslogan de la cita del PJ bonaerense reflejaba esa intención: #AhoraTodos. Otro de los artífices de la cumbre fue el intendente de Esteban Echeverría Fernando Gray, quien asumirá la presidencia partidaria a fin de año.
Lo más llamativo de la convocatoria, sobre la cual el propio Menéndez hizo un balance elogioso del número y representatividad de los asistentes, fue el faltazo de Fernando Espinoza y Verónica Magario. Se trata de dos dirigentes muy importantes para la estructura territorial y la orgánica partidaria del peronismo: Espinoza, que no pudo reelegir como titular del partido, está al frente del congreso partidario; Magario gobierna el municipio más importante de la provincia y al que Cambiemos sueña con dividir: La Matanza.
Presencias y ausencias
Otra ausencia muy importante fue la del intendente de Lomas de Zamora Martín Insaurralde, un dirigente con mucha proyección a futuro, quien no descarta competir por la gobernación en algún momento.
Insaurralde es uno de los intendentes peronistas que -sin ser del espacio más cercano a CFK, como Mario Secco (Ensenada), Jorge Ferraresi (Avellaneda) o Francisco “Paco” Durañona (San Antonio de Areco)- tiene hoy mejor relación con el kirchnerismo bonaerense.
En Costa del Este se comentó que Insaurralde no había podido asistir por estar de viaje.
Cuando llegó el momento de los balances, Menéndez dijo que estaba muy conforme con el quórum y destacó que estaban presentes “40 de los 48 consejeros”. También destacó la participación de los gremialistas Pablo Moyano (camioneros), Francisco ‘Barba’ Gutiérrez (UOM Quilmes) y Humberto Bertinat (trabajadores municipales); de la concejal tigrense Alejandra Nardi, titular del Concejo Deliberante de Tigre, que estuvo en Costa del Este en representación del massismo; y de dos intendentes que acompañaron la candidatura de Florencio Randazzo como Juanchi Zabaleta (Hurlingham) y Francisco Echarren (Castelli).
Un PJ abierto a la cuestión sindical
Quizá los momentos con mayor ‘pimienta’ los aportaron Moyano, quien dejaba ver un tatuaje de Independiente en el brazo, y el gremialista docente Roberto Baradel. El titular de Suteba había pedido participar del evento. «Hay que estar acá y todos juntos para pelear contra las políticas de avasallamiento de este Gobierno», exigió el secretario gremial de Camioneros.
Cuando le tocó hablar, Baradel explicó la situación en la que se encuentra el Instituto de Previsión Social (IPS) bonarense, el organismo clave para las jubilaciones en la PBA. Baradel adelantó también lo que se viene en materia de conflicto docente, que este año –todo lo indica- será otra vez fuerte.
Menéndez remarcó como un gran avance el contenido del documento que se difundió tras la cumbre. “Este es el gobierno de los ricos para los ricos. Atendido por sus propios dueños. La política económica de Cambiemos es un fracaso rotundo. El endeudamiento hoy vuelve a amenazar a generaciones enteras”, dice uno de los párrafos. En el texto el PJ se pronuncia contra la reforma laboral, cuestiona los tarifazos y la “desvalorización del salario” y llama a recuperar el consumo a través de la “expansión de la demanda”, como aconsejaba el economista John Maynard Keynes.
En diálogo con Tiempo, Menéndez relativizó y desdramatizó el significado político de las ausencias de Espinoza, Magario y otros. “No hablé con ellos. Pero el documento, quien lo pueda leer, va a poder ver que tenemos bastante unidad de concepción con ellos y con todos”, aseguró.
“Nosotros vamos a trabajar para que la agenda de todos esté contenida en la próxima reunión del consejo, que está fijada para el 20 de febrero. Verónica (por Magario) es la 1ª representante de la rama femenina (del PJ), y Fernando (Espinoza), el presidente del congreso partidario y el primer consejero por la tercera sección electoral. Ellos dos están absolutamente contenidos en el consejo, más allá de que pudieran venir o no. A mí me ha pasado de a veces no poder ir a una reunión”, agregó Menéndez, quien luego respondió otras preguntas.
-¿Se habló de la posibilidad de lanzar enseguida un candidato a gobernador bonaerense, para que tenga mucho tiempo para instalarse y hacer campaña?
-No se habló de candidaturas en ningún momento. Acordamos en que tenemos que tener una agenda común para la provincia y para toda la Argentina y que no debemos bajar el nivel de la discusión hablando de nombres propios. Lo de tirar nombres sobre la mesa atrasa. Sobre todo cuando se hace con tanto tiempo de anticipación.
-¿Una de las propuestas es reunificarse con el massismo y con Randazzo? ¿Eso incluye también al propio Massa?
-Sergio tiene la idea de que no pierda identidad el Frente Renovador pero al mismo tiempo armar un esquema para unificar temas y trabajarlos en conjunto. Lo que nos permitiría terminar confluyendo en 2019, en la PASO del frente que vayamos a armar, o a través de un consenso de otro tipo.
-Hace pocas semanas, la diputada Graciela Camaño, muy reconocida como legisladora por su experiencia y conocimiento, dijo que el massismo podría confluir en una unidad con algunos dirigentes kirchneristas pero nunca con Cristina. ¿Eso no boicotea la unidad?
-La política es una generadora de escenarios que en un primer momento no existen. Escenarios que parecen imposibles y que con el tiempo no los son. En algún momento todos estuvimos bajo el mismo paraguas, por lo que podemos volver a estarlo. Más allá de lo respetable de las argumentaciones de los distintos espacios, estamos transitando un proceso de acumulación para el que tenemos que tener inteligencia emocional, el equilibrio necesario y la habilidad política que nos permitan hacer posible la unidad. Acá no sobra nadie.
Fuente: tiempoar.com.ar